Los subcampeones Cavaliers de Cleveland demostraron hoy, miércoles, por qué son uno de los equipos favoritos para repetir en la serie final de la NBA al propinarle a los Raptors de Toronto una paliza de 116-78 en el quinto choque de la final de la Conferencia del Este que los dejó a una victoria de volver a disputar el título nacional.

Cleveland se repuso de las dos derrotas consecutivas que sufrieron a manos de los Raptors, triunfos que igualaron, 2-2, la final de la conferencia y aprovecharon su estatus como equipo invicto en la postemporada jugando en su hogar, el Quicken Loans Arena, para colocar contra la pared a los Raptors.

El delantero Kevin Love se repuso de dos actuaciones de baja producción en los partidos tres y cuatro de la serie y lideró la ofensiva de los Cavaliers al colar 25 puntos. Del mismo modo, LeBron James marcó 23 tantos, recogió seis rebotes y repartió ocho asistencias, mientras que el armador Kyrie Irving, que vivió una pesadilla ofensiva y defensiva similar a la de Love, también cerró el cotejo con 23 unidades, tres rebotes y tres asistencias.

Los Cavaliers no dieron tregua alguna a los visitantes Raptors con su certera puntería, pero también realizaron una gran labor defensiva sobre los dos cañones de Toronto, Kyle Lowry y DeMar DeRozan, al limitar su producción a 13 y 14 puntos, respectivamente. El resto de los jugadores de los Raptors no anotaron puntos en doble cifra.

Cleveland tendrá la oportunidad de acabar la serie y adelantar a la final de la NBA el viernes, cuando visitarán a los Raptors en el Air Canada Centre para el sexto desafío.