La mudanza del base José Juan Barea de regreso a Dallas está viento en popa tras finalizar el lunes un acuerdo con los Timberwolves de Minnesota para la compra de su último año de contrato.

Y es que Barea y los Mavericks ya han tenido conversaciones preliminares sobre un acuerdo que le pagaría el salario mínimo para volver a vestir la franela de Dallas si logra salir del proceso de 48 de ‘waivers’ sin que otro equipo lo reclame. La cuestión ahora para ambas partes es rezar que ese proceso transcurra sin inconvenientes, pues solo equipos que estén por debajo del tope salarial podrían reclamar a Barea desde ‘waivers’.

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Actualmente hay siete franquicias que están por debajo del tope salarial de $63 millones esta temporada y que son elegibles para reclamar a Barea si quisieran hacerlo. Estos son los Pistons de Detroit, los Hawks de Atlanta, los Suns de Phoenix, el Jazz de Utah, los Bucks de Milwaukee, el Magic de Orlando y los 76ers de Filadelfia. De esos equipos, quizás Milwaukee y Orlando podrían tener algún interés, basado en lo finito que están cada uno en la posición de armador.

De no ser reclamado en ‘waivers’ antes del miércoles a las 5:00 p.m., Barea entonces podría oficializar su acuerdo con Dallas por $1,310,286, que es el salario mínimo para un jugador con ocho años de experiencia en la NBA.  Para ello, Dallas primero tendría que dejar libre a un jugador y el lunes se encaminaba a salir de los servicios del base israelí Gal Mekel, a quien tendrían que pagarle los $816, 482 garantizados de su contrato del 2014 más los $947,246 de la próxima temporada, pero ese último podrían dividirlo en dos pagos anuales según las reglas de la NBA.

Aún así, Barea tendrá que competir en Dallas con otros tres armadores: Devin Harris, Raymond Felton y Jameer Nelson. De éstos, Felton estará fuera por, al menos, dos semanas debido a una lesión y luego de esto tiene que cumplir una suspensión emitida por la NBA de cuatro juegos.

Barea estaba supuesto a ganar $4.5 millones en su cuarto año de contrato con los Timberwolves y se especula que la compra del mismo superaba la cifra de los $3 millones.

La decisión en Minnesota con Barea se dio por mutuo acuerdo pues el nuevo dirigente Flip Saunders no podía garantizarle al boricua que jugaría un rol definido con el equipo todas las noches, pues sería relegado a tercer armador detrás del incumbente Ricky Rubio y del recién fichado Mo Williams. Esto muy a pesar que Barea tuvo una pretemporada notable, incluyendo un desempeño de nueve puntos, cuatro asistencias y dos robos de balón sin turnovers en el cuarto parcial del último partido de exhibición de Minnesota ante los Bulls de Chicago el pasado sábado para que los Timberwolves vinieran de atrás y ganasen, 113-112, en Chicago.

“Creemos que fue una buena decisión que ambas partes siguieran su propio camino”, dijo Saunders a los medios de Minnesota el lunes. “J.J. fue todo un profesional y tuvo un gran campamento con nosotros durante la pretemporada. Hizo todo lo que le pedimos. Ahora solo le deseamos lo mejor”.

La movida permitió que Minnesota pudiese abrir un espacio en su equipo para retener al delantero Glenn Robinson III, que fue la selección de segunda ronda de los Timberwolves en el sorteo de novatos de la NBA el verano pasado.

“Con Mo Williams llegando al equipo, él (Barea) pensaba que no tendría mucha oportunidad de juego. Y nosotros también pensamos que Glenn Robinson III tiene la oportunidad de ser un buen jugador en esta liga. Y cuando la franquicia toma decisiones para ir en cierta dirección, pues hay que tomar decisiones como esta”.

¿Qué número utilizaría en Dallas?

De jugar con Dallas, Barea no podrá utilizar el número 11 que tuvo con los Mavericks y que también utilizó en Minnesota debido a que el mismo lo ocupa el escolta titular Monta Ellis.

Según su tío, el Lic. José Barea, lo más posible sea el número cinco.

“Es el número que utiliza en la Selección de Puerto Rico y el que solía utilizar en categorías menores. De hecho, cuando comenzó en Dallas en el 2006 no usó el número cinco porque ya lo tenía Josh Howard”.

Otros números posibles podrían ser el 17 o el 26, ya que su hijo Sebastián José nació un 17 de febrero mientras que su propio día de nacimiento lo fue es el 26 de junio.