Desde el 2004 Puerto Rico no asiste a unos Juegos Olímpicos en su deporte rey, el baloncesto, y muchos han sido los señalamientos para que se logre salir de esa mala racha.

El problema es que si queremos romper ese maleficio y, sobre todo, no volver a repetirlo, no basta solo con escoger a X dirigente, implementar X estilo de juego por un periodo determinado de tiempo, incluir a X o Y jugador o comenzar a practicar con mayor tiempo de antelación.

Requiere de unos cambios mucho más profundos y fundamentales dentro de la Federación de Baloncesto de Puerto Rico, que incluyen su gobernanza, la masificación del deporte, su programa de categorías menores, su programa de equipos nacionales menores, la preparación educativa de sus dirigentes y hasta un nuevo contrato de filiación con el Baloncesto Superior Nacional con nuevas implicaciones.

Para ello el Director General del Programa Nacional, Georgie Rosario, se dio a la tarea de entrevistar a un grupo de  13 personas involucradas con el baloncesto para auscultar las áreas a mejorar de forma inmediata y de cara al futuro para asegurar que Puerto Rico siempre cuente con equipos competitivos.

Dicho grupo heterogéneo incluyó al presidente federativo Carlos Beltrán, al ex director asociado Joel Katz, al asistente del director asociado Alfredo Morales, a los dirigentes Nelson Colón, Carlos Morales y Flor Meléndez, a los ex jugadores nacionales Rolando Hourruitiner y Edgar Padilla, al árbitro Juan “Pucho” Figueroa, al presidente del BSN Lic. Fernando Quiñones y a los miembros del comité seleccionador Javier Torres, el ingeniero Victor González y el Dr. Oscar Santiago.

De ahí se radicó en noviembre los resultados del informe que fue presentado el miércoles a la prensa y que previamente había sido discutido por la Junta de Directores de la FBPR el pasado 7 de diciembre.

“El mayor consenso giró en torno qué los elementos a considerar para garantizar consistencia en calidad de juego no radica en la exclusividad del Equipo Nacional en sí. Hay asuntos en administración del equipo y la federación que ha detenido el cabal desarrollo del Equipo Nacional”, dijo Rosario.

“Para los entrevistados el Equipo Nacional es el eslabón final que a corto, mediano y largo plazo puede enriquecerse si se hacen las modificaciones correctas dentro de la federación. El consenso es que no empieza cuando se convoca al equipo, sino que son las acciones previas para robustecer el equipo las que cuentan. Y además, nadie mencionó que el fin principal es ganar todas las medallas, sino jugar bien siempre todos los torneos con jugadores bien preparados”.

A continuación los puntos más señalados por el grupo:

1)    Gobernanza de la FBPR- Que sea más inclusiva, con mayor democratización en toma de decisiones y estimular la participación masiva de con quien se hace baloncesto día a día.

2)   La ausencia de regulaciones con la masificación del deporte en categorías menores- “Hay una gran usencia de planificación, y desarrollo de las categorías menores. Se juega desaforadamente. La masificación requiere orden y es inevitable la revisión de calendarios, torneos, edades reglas, selecciones, viajes e involucramiento de liga afiliadas. Hay demasiados niños jugando mucho y aprendiendo poco”, dijo Rosario.

“También debe modificarse el enfoque en la parte de masificación en categorías infantiles, incluso jugar sin pizarrón. Que el fin sea desarrollar fundamentos, divertirse y crear mejores seres humanos y no siempre en el ganar desenfrenado, que distorsiona el propósito de esas categorías”, agregó el ingeniero González.

3)    Crear Instituto Académico de entrenadores, árbitros, líderes deportivos. Este proyecto pretende establecerse en alianza con alguna universidad para poder proveer los cursos necesarios.

4)   Proyecto de Formación del Programa Nacional. “Este ha sido el logo de la FBPR en los pasados años desde su inicio en el 2011. Todos lo elogian como proyecto modelo que funciona al margen del Equipo Nacional. Con una mejor organización de categorías menores se ampliaría su marco de formación. Actualmente, este proyecto básicamente recoge muchos de los mejores talentos del país desde categorías menores y tiene que desprogramarlos y reprogramarlos en su estilo de baloncesto. Muchos están acostumbrados a que lo único importante es meter el balón. Aquí los trabajamos en todas las destrezas necesarias para convertirlos en jugadores universales irrespectivamente de sus posiciones y en que sean buenos defensores individuales y no ‘zoneros’ de forma exclusiva”, dijo Rosario.

“La diferencia de nosotros con países como Argentina o Serbia es que los propios clubes ya hacen ese trabajo y cuando los jugadores llegan a su programa nacional ya tiene esa parte adelantada. El fin de muchos clubes hoy día solo es ganar y eso hay que cambiarlo”.

5)   Vínculo con el BSN- “Para la totalidad de los entrevistados es conflictivo. Se reconoce el esfuerzo económico que es mantener el BSN. Ha sido principal desarrollador del Equipo Nacional. A juzgar de entrevistados es medular que el BSN actúe en el desprendimiento del Equipo Nacional”,

“Hay que corregir la relación BSN y la FBPR. Que refleje en su contenido. Se ha dado la impresión que el BSN es la figura importante. La carreta al frente de los bueyes. A lo que hay que reforzar es a la FBPR. Ese acuerdo de filiación debe reflejar esa función jerárquica que debe tener el BSN con FBPR”.

6)   Contratos con BSN y Equipo Nacional- “Todo contrato que un jugador haga con el BSN el mismo debe comprometer al jugador con Equipo Nacional como deber fundamental si es convocado. Por alguna razón eso estaba antes y desapareció. Ese contrato que el jugador firma con BSN debe tener algo que proteja al Equipo Nacional. Y se habrá de establecer sanciones cuando un jugador del BSN se niegue a representar a su país sin justa causa”, dijo Rosario.

7)    Revisar el número de refuerzos en el BSN- El consenso fue bajar a dos inmediatamente y evaluar reducir a uno posteriormente en la medida que el BSN vaya nutriéndose de talento nativo, especialmente del que comenzará a llegar de los jugadores del Programa Nacional.

8)    Presupuesto de operación del Equipo Nacional lo maneje la estructura del Programa Nacional y no necesariamente el presidente federativo.

9)    Iniciar el proceso de conseguir el compromiso los jugadores del país, incluyendo a Peter John Ramos, Matt López Ricky Sanchez, Carlos Arroyo, David Huertas, Cortes, Maurice Harkless, Devon Collier - todos ausentes en pasado por lesiones o abstinencia – para la preselección de cara al Repechaje. Se habló de explorar posibilidades con Devin Booker, Shabazz Napier.

10)  Reforzar los Comité Seleccionador que tiene a su cargo la elección cuerpo técnico y selección jugadores. Debe haber uno o dos miembros que sean ex coaches o ex jugadores de la selección. Ese comité debe ser reforzado con gente que haya vivido el baloncesto desde sus entrañas.

11)   Consenso de que lo entrenadores del Equipo Nacional sean puertorriqueños para dirección del próximo ciclo y considerar la contratación por ciclos, siendo el próximo para 2016 y 2017. Se estableció que debe haber seis entrenadores que brinden seguimiento a jugadores que estén en Puerto Rico lo antes posible.

12) Establecer reglamento que elimine improvisación, limite los márgenes de confusión en el día a día y controle la opinión de los jugadores en términos cotidianos, así como dictaminar la asistencia a prácticas, horarios, dietas, alojamientos, viaje, comportamiento, conductas inaceptables, asistencia a terapias, etc. 

13) Incorporar psicólogo deportivo.

FUTURO INMEDIATO

Muchas de las medidas son prospectivas y se tiene planificado a que el relevo del Equipo Nacional con varias figuras que estuvieron en la Selección U17 que llegó quinto en el Mundial U17 del 2014 debuten durante los Juegos Centroamericanos y del Caribe del 2018 en Colombia.

Pero en lo que el ‘hacha va y viene’ hay que remar con el talento que hay y tratar de buscar el pase olímpico durante el Repechaje del 4 al 11 de julio. Para ello aún falta nombrar un nuevo staff técnico, nombrar a un nuevo director asociado que asuma el puesto dejado vacante por Joel Katz, comprometer a los jugadores del Equipo Nacional y delinear el plan de prácticas y fogueos.

Para ello, Rosario indicó que se han propuesto tenerlo todo a más tardar el 15 de febrero, casi un mes después que se elijan las sedes y los grupos del Repechaje el 19 de enero.

“Queremos darnos las próximas seis semanas para hacer las entrevistas correspondientes para cubrir las vacantes que tenemos y hacer las gestiones para conseguir el compromiso de los jugadores. La fase de los jugadores la haremos entre fines de enero e inicios de febrero”, dijo Rosario.