Ser un novato en la NBA tiene unos privilegios y, a su vez, varias desventajas. Entre ellas, ser el blanco de burlas y las constantes mofas por parte de los jugadores veteranos.

Ese fue el caso de Devin Booker Gutiérrez, quien fue objeto de una broma. Al salir de una práctica de los Suns de Phoenix, Booker encontró su auto Dodge Challenger lleno hasta el tepe de material para empacar.

Fue una de tantas maneras para darle la bienvenida a Booker, un escolta de 6’6” que jugó una temporada en la Universidad de Kentucky antes de dar el salto a la NBA. 

Por suerte, Booker tomó la broma con buen sentido del humor. En lugar de despejar su auto del material, optó por conducirlo mientras agradeció a sus compañeros.