Visiblemente agotados por la larga travesía que comenzó en Buenos Aires, Argentina, el Equipo Nacional Sub 17 recibió con entusiasmo todos los honores que se le concedieron hoy desde el instante que tocó suelo puertorriqueño en un vuelo procedente de Houston, Texas. 

Nueve de los 12 jugadores que lograron la medalla de bronce en el Mundial Sub 17 finalmente se encontraron con sus respectivos familiares luego de 15 días en la distancia. 

Luego, hicieron un recorrido por varios sectores de San Juan que incluyó el residencial Llorens Torres, la Calle del Parque, la Avenida de Diego y el Expreso José de Diego antes de hacer una entrada el Coliseo Roberto Clemente para un corto festejo público. 

“El mayor premio es ver al pueblo de Puerto Rico apoyar a este equipo, ver personas deteniéndose a saludar. Eso es lo importante, lo demás llega por sí solo”, dijo Yum Ramos, presidente de la Federación de Baloncesto de Puerto Rico. 

“El deporte unifica a un país de la misma manera que ocurrió cuando Mónica Puig ganó la medalla de oro en las Olimpiadas, el Team Rubio (Clásico Mundial de Béisbol) o cuando Javier Culson corría. Fue bonito y emotivo ver la gente”, agregó.

El grueso del equipo no podía dejar de sonreír por la gesta. La última vez que un equipo de baloncesto masculino obtuvo una medalla en una competencia mundialista fue en 1997 cuando se logró la plata en el Mundial Sub 22.

“Llegar terceros no estaba en nuestros planes. Lo que queríamos era hacer historia. La última vez un Sub 17 llegó en quinto lugar y la meta era superar eso. Dentro de todo pudimos lograr la medalla. Estos son cosas que no se pueden explicar”, compartió el escolta Víctor Rosa.

Familiares y amigos esperaban con ansias tener ese primer contacto con los jóvenes, quienes enseguida se confundieron en abrazos.

“Estar en un Mundial es algo grande y me siento orgulloso. La clave fue que Omar González nos dijo que teníamos que jugar duro. Somos unos de los equipos más pequeños (en estatura) y teníamos que dejar que la defensa fuera la que dictara. Eso hicimos”, compartió Jermaine Miranda, quien fue el líder en puntos por juego por Puerto Rico durante el torneo con aportación media de 15.4 tantos por cotejo. 

El Equipo Nacional de Baloncesto Sub 17 disfrutó un recibimiento de héroes ayer tras su gesta en el Mundial.

Ramos aseguró ayer que la plantilla será invitada para determinar a los integrantes que representarán a Puerto Rico en el Mundial Sub 19 en el 2019.

“Vamos a invitar a todos los jugadores para que el cuerpo de entrenadores determine cuáles encajan mejor con las necesidades del equipo. Nadie tiene ahora mismo un lugar asegurado y le queremos dar la oportunidad a todos de ganarse un espacio”, explicó Ramos.

“Creemos en el relevo generacional. Entendemos que tenemos un buen equipo. Vamos a darles seguimiento a los jugadores”, agregó.

Para ello, Ramos señaló que para continuar con el desarrollo de los programas, se requiere se compromiso económico tanto del sector gubernamental y privado.

 “El Gobierno debe entender que el deporte debe ser una sus prioridades. Verlo como una inversión y no como un gasto. Así es que obtenemos un resultado como el que logró este equipo de baloncesto. Los deportes unen al pueblo, generan actividad económica y tienen un propósito social”, concluyó Ramos.