OAKLAND, California — Steve Kerr, el Entrenador del Año de la NBA al frente de los Warriors de Golden State, reconoció el viernes que consumió marihuana en dos ocasiones en los últimos 18 meses para tratar con un debilitante dolor de espalda.

Kerr dijo al Warriors Insider Podcast de Monte Poole, de Comcast SportsNet Bay Area, que empleó marihuana terapéutica pero que no le ayudó, y que los analgésicos habrían sido algo peor.

"No tengo ni idea de si podría, por ejemplo, haber dado positivo en un control antidopaje. Ni siquiera sé si estoy sujeto a controles antidopaje o a cualquier ley de la NBA", declaró Kerr. "Lo probé y no me ayudó en absoluto".

Kerr, de 51 años, se perdió los 43 primeros partidos de la pasada temporada y la histórica foja de 24-0 con la que los Warriors arrancaron el curso por una baja tras complicaciones por dos operaciones de espalda. Una filtración de líquido espinal le provocó terribles dolores de cabeza, náuseas y dolor en el cuello, además de otros problemas que le hicieron sentirse frustrado y desanimado.

"A deportistas en todas partes se le receta Vicodin como si fuese vitamina C, como si no fuese un gran problema", explicó el técnico, que espera que las ligas deportivas "sean capaces de mirar más allá de la percepción" y que es solo cuestión de tiempo que las normas cambien.

Kerr acaba de ser elegido mejor entrenador del mes de noviembre en la Conferencia Oeste.