¿Quién dijo que las mejores jugadas y canastos increíbles solo se dan en la NBA? 

En un partido de baloncesto de una escuela elemental en Japón se dio uno de los mejores canastos contra la chicharra (en inglés buzzer-beaters) que se halla visto en el baloncesto. 

Un jugador del equipo con uniforme blanco recibió una falta personal con dos segundos por jugar y con su conjunto abajo por un punto. El pequeñín anotó los dos tiros libres para darle la ventaja a los suyos, la cual parecía aseguraría el triunfo. 

No obstante, un jugador del equipo contrario logró un canasto desde el otro lado de la cancha para darle la dramática victoria al conjunto de vestimenta negra, 50-49, lo que causó una eufórica reacción de los presentes. 

Curioso que el tiro solo contó por dos puntos, pero aun así fue lo suficiente para que el equipo de uniforme negro se llevara el emocionante encuentro. 

La anotación del jugador japonés no tiene nada que envidiarle a la gesta parecida que hiciera unos años atrás Tyreke Evans para darle un triunfo a su entonces equipo Kings de Sacramento en un juego de la NBA.