Existe por lo menos, una persona en el planeta que puede contener a Stephen Curry: su hija. 

Es que la hija de dos años del Jugador Más Valioso de la actual temporada de la NBA se robó el show durante la conferencia de prensa de anoche, celebrada tras la victoria de su equipo, Golden State Warriors contra los Houston Rockets, con puntuación final de 110-106.  

La pequeña se arrastró a través de la falda de la mesa, hasta que él la levantó y la puso en su regazo. Riley saludó a los periodistas e interrumpió Curry un par de veces.

En un momento dado, le murmuró una cuantas palabras a Curry y él le dijo: "¿Puedes esperar un momento. Ok?". Ella le respondió: "Silencio", arrancando las risas de los presentes. 

El jugador sonrió e hizo un gesto de incredulidad, al tiempo que aseguró  a los reporteros que su hija, por lo general, es más reservada. Las fotos y vídeos de la escena se divulgaron rápidamente por las redes sociales. 

El jugador anotó 34 puntos, seis rebotes y cinco asistencias en el primer juego  de la Conferencia Oeste.