Si la temporada del Baloncesto Superior Nacional del 2017 comenzara  hoy, la misma solo contaría con seis equipos y no incluiría a los campeones defensores Capitanes de Arecibo ni a los finalistas Vaqueros de Bayamón.

Y es que ambas franquicias figuran entre las cinco que se acogieron a la solicitud de receso ayer, lunes, fecha límite para someter esa petición.

Los otros equipos que  solicitaron receso fueron los Cangrejeros de Santurce, los Atenienses de Manatí y los Atléticos de San Germán.

De esta forma, solo Ponce, Quebradillas, Aguada, Mayagüez, Humacao y Guayama optaron por mantenerse firmes en su intención de jugar en el 2017.

“En nuestro caso particular, el equipo está a la venta. Pero lo que empeora nuestra situación y amenaza con hacer desaparecer el deporte profesional en Puerto Rico es una reciente ley aprobada, en la cual toda actividad que genere algún lucro no será eximida de pagar luz y agua en las instalaciones. Ya lo del agua creo que está aprobado, pero si se aprueba lo de la luz será insostenible hacer deporte en este País”, advirtió el co apoderado de los Capitanes,  José Couto.

“Hasta la pasada temporada,  todos los equipos recibían el uso de sus canchas libre de costo por parte de los municipios, excepto nosotros que corremos la operación de nuestro coliseo. Pero si a eso le agregas el no tener subsidio de luz y agua, el costo podría ser de unos $150,000 mensuales adicionales. No hay quien  aguante ese empuje en ningún deporte. En la reunión de la liga del miércoles haré una petición para que nos unamos los apoderados y se pelee esto de forma conjunta”.

En una línea similar se expresó José ‘Picky’ Servera, apoderado de los Atléticos.

“Nuestra decisión es más preventiva que otra cosa. Queremos jugar, pero hay que ver qué hará la Junta Fiscal en Puerto Rico en septiembre y octubre. Van a recortar las aportaciones de los municipios y todos sabemos que siempre empiezan por las artes y los deportes, aunque no debería ser así. Y si aprueban lo de la luz, va a ser peor todavía”, dijo Servera.

“Aquí todo el mundo tiene que hacer sacrificios y apretarse los pantalones, no solo los apoderados. Aquí hay que discutir abiertamente con los jugadores la posibilidad de reducir los salarios y de que los que quieran tener agentes, que les paguen a sus agentes de sus salarios. Ahora mismo hasta nuestro auspiciadores están atrasados por su propios problemas y nosotros hemos tenido que hacer conciertos con Tommy Torres, Ednita Nazario y tenemos otro con Gilberto Santa Rosa para tratar de ponernos al día en la nómina”. 

En espera Manatí

En el caso de los Atenienses, el apoderado Félix “Felo” Rivera indicó que sus aspiraciones dependen de lo que suceda en los comicios del mes de noviembre, pues el actual alcalde Juan ‘Aubín’ Cruz Manzano se retira y entrarán nuevos candidatos al ruedo.

“El pacto que yo tenía con el alcalde que sale hay que ver si es renovado por la persona que gane la alcaldía para el 2017. Ya yo me reuní con el candidato que ganó la primaria del PNP en Manatí y tiene intenciones de renovar el acuerdo existente. Pero no tendré certeza de eso hasta después de noviembre”, explicó Rivera.

“Sin un acuerdo de esa índole no me puedo dar el lujo de repetir en Manatí, y menos con la baja en asistencia que hubo la pasada temporada. Es una petición de receso en forma preventiva”, agregó.

Santurce, por su parte, no logró llenar las expectativas de asistencia, lo que generó duras pérdidas y la opción de ellos está entre recesar, mudarse (se rumora Caguas) o que el gobierno capitalino incremente su aportación.

“En el 2016 rompimos récord de abonados con sobre 400, pero el respaldo en la venta de taquillas fue bien bajo a pesar de que terminamos empate en primer lugar en temporada regular y teníamos buenas actividades en cada juego. Pero sin respaldo está fuerte”, dijo el apoderado Ariel Rodríguez. “Además, es hora que los equipos reduzcan gastos. La liga no aguanta los salarios que hay bajo la situación económica que se vive”.