Quebradillas. En el Guajataca no se duerme desde el lunes.

La celebración de todo un pueblo por el campeonato que conquistaron sus Piratas continuaba ayer por las calles del pueblo.

Como si no hubiese sido suficiente la celebración en la plaza pública la misma noche que conquistaron el campeonato del Baloncesto Superior Nacional (BSN), todavía ayer jugadores y fanáticos protagonizaron una enorme caravana para compartir la alegría que no experimentaban hace 34 años.

Desde horas de la tarde, miles de fanáticos esperaban en sus carros, desde sus casas o negocios por la caravana comandada por los nuevos campeones, que recorrió los barrios quebradillanos por varias horas y culminó en la plaza de recreo.

Mientras, en una esquina de la plaza, un grupo de amigos celebraban y analizaban la serie final en que sus Piratas derrotaron a los Leones de Ponce.

“Sabía que el sábado no íbamos a ganar en Ponce, pero estaba seguro de que aquí íbamos a ganar.La fanaticada se lo merece después de tantos años”, expresó Rafael Deliz, un quebradillano que vive en Carolina y no titubeó para regresar a su pueblo a celebrar.

“Los quebradillanos estamos llenos de regocijo porque las generaciones de ahora no habían vivido esto. Históricamente, celebraciones como esta son las que unen al pueblo. El mayor legado de Quebradillas es el baloncesto”, dijo Pedro Lugo, quien fue gerente general del quinteto.

Mientras los mayores recordaban la historia de su amado equipo, poco a poco la plaza Luis Muñoz Rivera se llenaba de gente de todas las generaciones, con banderas, camisetas y bandanas alusivas al campeonato, que esperaban que llegaran sus héroes, los que le devolvieron la alegría al pueblo, para continuar la celebración con música y fiesta, 24 horas después de conquistado el título.

Finalmente, la caravana con algunos miembros de los Piratas llegó al centro urbano en horas de la noche para la alegría de los miles de fanáticos que abarrotaron la plaza.

“Me encanta el ambiente, nunca he visto algo así”, le dijo Lorenzo Mata a Primera Hora. “Me gustaría volver (a jugar con los Piratas), la gente es humilde, me quieren a mí y al equipo. Esto es inolvidable", añadió el azteca.

Cerca de las 7:30 p.m., el resto del equipo hizo su entrada a la tarima de la plaza, mientras los jugadores se abrían paso entre la multitud y se tomaban fotografías con fanáticos y firmaron autógrafos.

“Es asombroso, nunca había visto algo así”, dijo el importado Shawn Redhage en un aparte, luego de saludar al público desde el micrófono con algunas frases en español: “Yo quiero a Quebradillas mucho. ¡Piratas, ahí!", dijo para el deleite de los miles de fanáticos que no dejaban de aplaudir.

David Huertas, “el MVP de corazón”, como fue presentado, recibió una gran ovación del pueblo quebradillano. “Gracias por apoyarnos anoche y durante toda la temporada, y por apoyarme en los cinco años que llevo aquí”, expresó Huertas desde la tarima.

Unas 5,000 personas vivieron la tensión y luego la magna celebración.