Los árbitros de la NBA no son infalibles, pero durante los actuales playoffs el desempeño de algunos de ellos han dejado mucho que desear.

En lugar de permitir que sean los jugadores quienes deciden los resultados de los partidos, han sido los pitazos –o la ausencia de ellos- los que han tenido un papel protagónico en el momento menos indicado.

El primer juego entre los Warriors de Golden State y el Thunder de Oklahoma City por final de la Conferencia Oeste, no estuvo exento de algunas jugadas que, simplemente, los referís dejaron pasar por alto. 

El referí Monty McCutchen le concedió a Russell Westbrook un tiempo pedido cuando restaban 17.2 segundos de juego a pesar de que claramente arrastró ambos pies y corrió con el balón, lo que de haberse cantado correctamente le hubiese devuelto la posesión del balón a los Warriors. Sin embargo, la omisión prácticamente selló el triunfo de Oklahoma City 108-102.

Joe Borgia, vicepresidente que supervisa las repeticiones y los árbitros para la NBA, se expresó sobre la jugada.

“Los oficiales, ninguno pudo colocarse en una buena posición para ver que arrastrara el pie”, dijo Borgia en NBA TV durante una entrevista post juego. “Es desafortunado, pero tantas cosas están ocurriendo en el momento y parte del arbitraje es estar en los ángulos adecuados. A veces no se puede y en este caso no tenían un buen ángulo en la jugada”.

Steve Kerr, dirigente de los Warriors, reclamó al momento, pero no fue más allá después del partido.

“Pensé que corrió con el balón, pero no fue pitado. Son cosas que pasan”, dijo Kerr.

Pero no ha sido la primera vez que el Thunder se ha beneficiado del pobre arbitraje durante los playoffs.

Múltiples omisiones 

En los segundos finales del segundo partido de la ronda semifinal de la Conferencia Oeste entre el Thunder y los Spurs de San Antonio, a los árbitros se les ‘escaparon’ varias jugadas en un caótico desenlace. Al menos ocurrieron cuatro faltas ofensivas que no fueron pitadas. Doin Waiters le dio un codazo a Manu Ginóbili para abrir espacio en un intento por pasar el balón a Kevin Durant. Si la falta ofensiva hubiese sido pitada, los Spurs recuperaban posesión del balón y, tal vez, el resultado era distinto.

¿Dónde está el pito? 

Dwayne Wade reaccionó furioso cuando no fue favorecido por los referís en los segundos finales del quinto juego del Heat de Miami contra los Hornets de Charlotte. Wade reclamó que recibió, por lo menos, dos faltas. Miami perdió el juego, aunque eventualmente ganó la serie. Después de una revisión de la jugada, la NBA validó la decisión arbitral.  

Ayuda extra 

James Harden se vistió de héroe en el tercer partido de la serie contra los Warriors, pero todo con la ayuda de su brazo derecho y de los árbitros. Cuando Harden bajó el balón al lado ofensivo, inició el contacto con Andre Iguodala y lo empujó antes de anotar el canasto para ganar el juego. La NBA luego afirmó que Harden cometió falta ofensiva y el canasto debió ser invalidado. Eventualmente, los Warriors ganaron la serie.