Nueva Orleans. El gerente general de los Kings de Sacramento, Vlade Divac, se dirigió al fin de semana del Juego de Estrellas convencido de que era el momento de separarse del centro de DeMarcus Cousins.

Considerando que son una franquicia que parece encaminada a una 11ma temporada consecutiva sin lograr un puesto de clasificación a la postemporada, los Kings decidieron que era hora de cambiar su rumbo. Con eso en mente traspasaron a Cousins y al delantero Omri Casspi a los Pelicans de Nueva Orleans a cambio de Tyreke Evans, el jugador de primera selección en el Sorteo de Novatos del 2016 –Buddy Hield–, a Langston Galloway y a dos selecciones de primera y segunda ronda para el draft de este verano.

Cuando se le preguntó el lunes por qué no esperó por una mejor oferta más cerca de la fecha límite del jueves, Divac dio una curiosa respuesta que planteó más preguntas de las que respondió.

“Lo más probable es que conseguiríamos menos porque tuve un mejor acuerdo hace dos días”, dijo Divac. “No quiero entrar en detalles, no quiero discutir el proceso”.

Cousins ahora se unirá a otro exegresado de la Universidad de Kentucky y que también es un All-Star en la NBA, Anthony Davis. 

Cousins está promediando 27.8 puntos y 10.6 rebotes esta temporada y puede convertirse en un agente libre en 2018 a menos que los Pelicans logren firmarlo con una extensión.

Los Kings no han ganado más de 33 juegos en una temporada desde que reclutaron a Cousins con la quinta selección del draft del 2010 y se cansaron de sus payasadas, las que incluían frecuentes peleas con entrenadores, miembros de la prensa y funcionarios de la gerencia. Él lidera la NBA con 17 faltas técnicas esta temporada, lo que le condujo a una suspensión de un juego a principios de este mes. Además será suspendido de nuevo después de su siguiente falta técnica y por el resto de la temporada regular con otras dos más.

Divac mencionó con frecuencia temas de cambio de cultura y carácter al explicar el pensamiento detrás del acuerdo, diciendo que la franquicia necesita un cambio a pesar de sólo estar a 1 1/2 juegos de desventaja de Denver en la lucha por la octava y última posición de clasificación en la Conferencia Oeste.

“Realmente amo a DeMarcus”, dijo Divac. “Es un gran chico. Pero sencillamente no se ajusta a los planes de lo que estamos tratando de hacer. Le deseo lo mejor. Espero que esto tenga un efecto positivo en su carrera”.

En cuanto a los Pelicans, y su movida para unir a Cousins con Davis, esto envía un mensaje que estos están bien enfocados en poder hacer un empujón en los últimos 25 juegos de la temporada en esta primavera, con tal de meterse en los playoffs y tal vez tener una buena corrida en ellos.