Guayama. Manolo Cintrón no es extraño a proyectos de reconstrucción o a entrar como bateador emergente para encarrilar equipos luego de pobres comienzos.

Los dedos de sus dos manos no dan para contar las ocasiones que Cintrón a enfrentado situaciones así en sus más de 20 años de experiencia a nivel local e internacional, por lo que su más reciente reto de tomar las riendas de unos Brujos de Guayama que iniciaron 0-3 esta temporada 2017 del Baloncesto Superior Nacional será solo uno más en su lista.

De hecho, viene de coger al club de la Universidad Autónoma de Hidalgo en la liga de México – que venía de un receso de dos años y de iniciar la temporada con record de 3-7 – y los ayudó a terminar con marca de 22-14 y a llegar a semifinales, eliminándose con los eventuales finalistas Soles de Mexicali.

“A primera vista, los Brujos son un equipo que tiene bastante talento disponible. Simplemente, no le han podido exprimir lo máximo de su talento. Hay mucho espacio para mejorar en todas las áreas y ése será mi trabajo. Estamos a tiempo para enderezar a los Brujos”, dijo Cintrón a Primera Hora.

Entre las áreas que Cintrón desea mejorar lo antes posible está la defensa colectiva y la fluidez de la ofensiva a media cancha.

“Primero que todo, hay que hacer un mejor trabajo defensivamente. Hay que hacer que la defensa sea responsable por crear algunas oportunidades en transición y canastos fáciles. No se puede vivir de solamente de los que puedas generar a media cancha. Hay que empujar el balón cada vez que se pueda”, dijo Cintrón, quien entra por el joven Jorge Otero, quien dimitió luego de tres partidos.

“En lo que refiere a la ofensiva, hay que trabajar bastante en la fluidez del ataque. Rara vez hay pase extra, no hay cortinas para los tiradores y se está jugando mucho de afuera hacia adentro. Es una de las razones que Larry Ayuso no hay lucido bien. Hay que establecer la pintura, hay que hacer cortinas y hay que hacer el pase extra”.

Actualmente, los Brujos figuran antepenúltimos en asistencias colectivas con apenas 15.7 por juego, lo cual no compara favorablemente con los líderes de esta faceta, los invictos Piratas de Quebradillas, que promedian 28.7 por juego. También producen 35.3 rebotes por juego.

“Cuando tu consigues 40 rebotes y 20 asistencias, tienes grandes probabilidades de ganar. Si haces menos de 20 asistencias estás apretado. Esa es un área que hay que trabajar bastante”, dijo Cintrón.

Quizás esas facetas mejoren un poco con la llegada del nuevo refuerzo Damien Wilkins, quien entra por Chris Cayole. Wilkins promedió 17.3 puntos, 4.3 rebotes y 2.8 asistencias con los Indios de Mayagüez en el 2015.

“Básicamente, Guayama estaba jugando con un solo refuerzo (Eugene Phelps). Wilkins debe ayudarnos en esa fluidez porque es un buen pasador y le va a quitar presión a Ricky Sánchez”, dijo Cintrón.

Cintrón estaba pautado a debutar anoche en Guayama ante los Santeros de Aguada que comanda su compadre y amigo Eddie Casiano.

Para Cintrón, ésta será su primera experiencia al mando de la franquicia de Guayama tras haber estado al mando de otras ocho franquicias en el BSN (Bayamón, Quebradillas, Humacao, San Germán, Ponce, Mayagüez, Morovis y Arecibo). También lleva siete años consecutivos dirigiendo en la liga de México, donde ganó campeonato en el 2016 con los desaparecidos Pioneros de Cancún.