Cuando José Juan Barea confrontó molestias en su espalda la semana pasada, que lo forzaron a perderse un par de juegos y retrasar su conquista de la barrera de los 3,000 puntos anotados en la NBA, un médico boricua con oficina en la ciudad de Dallas, Texas, fue quien lo atendió para sacarlo de su malestar en otro par de días e impulsarlo para hacer historia.

Barea relató a Primera Hora ayer que los partidos que se perdió en Oklahoma City y Nueva Orleans los días 9 y 11 de enero fueron debido a un intenso dolor en la espalda, producto de los principios de un disco herniado.

“El área me llevaba molestando un par de semanas. Pero el día que jugamos en Oklahoma City no me pudo ni mover cuando me levanté en la mañana. Sentía como si tuviera algo espetado en la espalda”, reveló Barea.

Casi en acción de emergencia, el jugador se movió ese día junto al entrenador de su equipo, los Timberwolves de Minnesota, a la vecina ciudad de Dallas, donde el neurocirujano boricua Luis Mignucci tiene oficina y atendió a Barea. El diagnóstico ofrecido fue una pequeña hernia en el disco L5.

Según Barea, la lesión no es nada seria. Se atiende con medicación, terapia y ejercicios.

“Me pusieron ese día una inyección. Cortisona y un bloqueador para el dolor. Dos días después ya estaba jugando y todo está bien”, dijo Barea, quien ha seguido atendiendo el área con intensos ejercicios de fortalecimiento.

Al retornar a cancha el pasado 13 de enero, Barea anotó 15 puntos frente a los Spurs de San Antonio, para convertirse en el segundo jugador nacido en la Isla con más de 3,000 puntos en la NBA. Carlos Arroyo es el líder en ese departamento con 3,770. Arroyo logró sus puntos en parte de nueve temporadas con un promedio de 6.6 puntos por juego. Barea llegó a los suyos en parte de siete temporadas y un total de 46 juegos menos que Arroyo a razón de 7.9 puntos por cotejo.

“Me entero siempre de los logros así porque la gente me tuitea. Para mí, no hay nada más especial que el campeonato que gané en Dallas. Por lo demás, los logros me encantan porque sigo representando con orgullo a Puerto Rico”, dijo Barea, quien pese a la lesión atendida no espera perderse por nada jugar con Puerto Rico en el Premundial 2013.

Mientras, explicó que el equipo de Minnesota le aceptó ir a tratarse con un especialista como Mignucci sin problemas.

“Si hubiera sido con los Mavs, tenía que ir al médico del equipo”, dijo Barea. “Acá son diferentes en eso”.