A rey muerto, rey puesto.

Tras sufrir el desplante del centro DeAndre Jordan esta semana, los Mavericks de Dallas aparentan tener ya a quien darle sus millones luego que el base Deron Williams llegara a un acuerdo para rescindir los últimos dos años de su contrato con los Brooklyn Nets para poder marcharse a jugar con el equipo de sus ciudad natal.

Williams, que estaba pautado a generar $43.37 millones de dólares por las siguientes dos temporadas acordó una compra parcial del remanente de su pacto con Brooklyn para así conseguir su libertad y poder firmar con Dallas por un acuerdo especulado de $10 millones por dos años.

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El jugador era elegible para la compra de su contrato porque su pacto actual fue firmado bajo el acuerdo previo entre la NBA y la unión de jugadores que venció en el 2011. En nuevo pacto provee a cada equipo la libertad de salir de un contrato ‘no deseado’ que ellos quisieran disponer y en esta ocasión Brooklyn lo hizo con Williams.

Para Brooklyn, el acuerdo pone fin a un periodo de decepción con Williams, quien nunca llenó las expectativas de líder con los Nets ni la promesa de ser contendiente al campeonato pese a su holgado salario. Además, le permite a Brooklyn estar por debajo de los $87 millones en nómina y así no tener que pagar una millonada en penalidades. De hecho, la compra del contrato de Williams – que se estima ronda los $30 millones – se paga sola con lo que se ahorrará Brooklyn de pagar en penalidades sin mantenía el contrato del jugador.

En Dallas, Williams prácticamente se ganaría casi lo que dejó sobre la mesa en Brooklyn, amén de llegar a un equipo que siempre lo ha querido y donde tendrá la oportunidad de rehacer su carrera. 

Para los Mavericks también es una forma de salvar cara luego del cambio de parecer DeAndre Jordan, de echar hacia un lado el acuerdo verbal que tenía con Dallas para regresar con los Clippers de Los Ángeles en lo que ha sido la comedia de la semana.

La eventual firma de Williams en Dallas, sumado a la adquisición del centro Zaza Pachulia desde Milwaukee, parece ser un buen plan B de Mark Cuban para complacer a las masas y presentar un equipo un poco más competitivo.