No hay dudas de que Michael Jordan es uno de los atletas más emblemáticos de todos los tiempos y el mejor en el baloncesto.

Marcó un antes y un después en el deporte, en la NBA ,  en el mercadeo y en el dinero que puede generar una figura deportiva.

Sin embargo, sí hay dudas respecto a un aspecto de su carrera. Aunque no es una teoría nueva, en días recientes ha resurgido la idea de que el primer retiro de Jordan, en  octubre de 1993  después de conquistar su tercer título al hilo con los Bulls de Chicago, no fue para “descansar”.

Según el veterano periodista Jack McCollum, de Sports Illustrated, el primer retiro del ex astro de los Bulls no fue tal cosa, sino un acuerdo con la NBA para no recibir una suspensión por su conocido problema con las apuestas.

La duda inicia con la misma conferencia de prensa en la que Jordan anunció su retiro.

Tanto McCollum como Marcel Mansour, de www.bleacherreport.com, no encuentran una contestación lógica para que el ex jugador se retirara en pleno apogeo, conociendo su pasión por ganar –que también se reflejaba en su inclinación por las apuestas– y por ser el mejor de todos los tiempos.

“De aquí a cinco años, si regresa el deseo, si los Bulls me reciben, si David Stern me permite regresar a la liga, puede que yo regrese”, dijo Jordan cuando se le preguntó si volvería a la NBA.

Para los que proponen que hubo un acuerdo entre el comisionado  Stern y Jordan,  el mismo se hizo para evitar un escándalo que no solo iba a perjudicar al entonces campeón, sino a la NBA.

Sobre todo, cuando nadie mencionó al comisionado Stern en la pregunta.

La liga, que había abierto una investigación por los problemas de apuestas del jugador, informó que no había encontrado nada.

La NBA no quería un Pete Rose

No es secreto que en 1993 ya Jordan estaba envuelto en apuestas ilegales y había perdido millones de dólares apostando con gente de dudosa reputación, incluido un acusado de tráfico de cocaína.

Dentro de los distintos casos documentados en libros como Michael and Me: Our Gambling Addiction...My Cry for Help!, de Richard Esquinas –uno de los compañeros de apuestas de Jordan– y Money Players Days and Nights Inside the New NBA, de Armen Keteyian, se detallan distintos episodios de la ex estrella de la NBA en apuestas.

En uno de los relatos, se infiere que Jordan estaba apostando en deportes profesionales, lo que rompería una ley no escrita de profesionales que pueden utilizar su deporte para ganar dinero ilegalmente.

Precisamente por sus problemas de apuestas y no por lo que hizo dentro del terreno, el ex beisbolista Pete Rose fue expulsado de por vida de las Grandes Ligas.  A pesar de ser el líder de todos los tiempos en sencillos conectados, quedó fuera del Salón de la Fama de Cooperstown.

“El béisbol era más que Pete Rose. Pero Jordan era más que el baloncesto. Era Nike. Era McDonald’s. Era Chevrolet... Jordan significaba mucho dinero para mucha gente”, escribió McCollum.

Precisamente, una suspensión pública contra Jordan hubiera significado un escándalo enorme y una pérdida económica no solo para él, sino para la liga y todas las marcas que se beneficiaban de su imagen.

Entonces, vuelve a cobrar fuerza la teoría de que su primer retiro fue más bien una suspensión disfrazada.

Otras consideraciones

Otro aspecto que levanta sospechas es que Jordan dijo que quería pasar más tiempo con su familia, su entonces esposa y sus hijos.

Sin embargo, unos meses después de su retiro, se unió a un equipo de liga menor de los Medias Blancas de Chicago. De modo que esa “excusa” pierde validez, pues el ritmo de viajes y trabajo no permitía que el ex astro pasara más tiempo con sus seres cercanos.

“Ya alcancé la cima... no tengo nada más que probarme” , dijo Jordan al anunciar su retiro, unos meses después del asesinato de su padre.  “Mi mayor gratificación, lo más positivo que puedo obtener de que mi padre no esté aquí conmigo hoy es que él vio mi último juego de baloncesto. Y eso significa mucho”.

Entonces, se preguntan los que creen que sí hubo un acuerdo para no dañar la imagen del jugador y de la NBA, ¿por qué regresar menos de tres años después para ganar tres campeonatos más? En efecto, como auguró en 1993, ¿le permitió David Stern regresar a la liga luego que se atendiera de sus problemas de apuestas?

Definitivamente, hay muchas dudas que solo con el tiempo, tal vez, se aclaren respecto al primer retiro del mejor baloncelista de todos los tiempos.