Es un mal que se repite año tras año en las canchas del Baloncesto Superior Nacional (BSN). Y en un intento por finalmente erradicar los altercados de los coliseos boricuas, los directivos del BSN podrían optar por sanciones más severas. 

El más reciente episodio de violencia en las canchas se dio anoche al concluir el partido entre los Piratas de Quebradillas y los Leones de Ponce, cuando un árbitro tuvo que ser trasladado a un hospital luego que fanáticos lo atacaran con botellas y hasta sillas. 

El luchado encuentro, celebrado en el coliseo Raymond Dalmau de Quebradillas, fue ganado por los visitantes Leones, 99-98.

Fernando Quiñones, presidente del BSN, adelantó hoy que no se descarta la posibilidad de, en un futuro no muy lejano, realizar juegos a puerta cerradas como ha sucedido en ligas europeas después de enfrentamientos entre fanáticos. 

Dicha sanción afecta las arcas del equipo sancionado, que no obtendrá ganancias de taquilla y cantina por ese partido. 

Anoche, al finalizar el desafío en el Raymond Dalmau, los oficiales Joel Ortiz, Joel Sánchez y Javier Canales fueron agredidos por varios aficionados piratas. Trascendió que Ortiz sufrió una herida en la cabeza y fue llevado a un hospital para atención médica.

“Tomaremos medidas más enérgicas para evitar que esto suceda. Ya hemos estado en comunicación con la gerencia de Quebradillas como parte del proceso de investigación. Es una lástima que el esfuerzo que se está haciendo para mantener a la franquicia en Quebradillas se vea afectado por dos o tres irresponsables”, mencionó Quiñones, quien tiene en agenda discutir esta tarde los informes con Alfredo “Piraña” Morales, director de torneo, antes de delinear los planes de acción. 

“Tenemos todas las alternativas disponibles. Una de ellas es hacer los juegos a puerta cerrada, en canchas neutrales u obligar a los equipos jugar como visitantes”, agregó.

Es la segunda vez esta semana que los Leones están en el centro de un incidente violento.

El pasado sábado, surgió un altercado entre jugadores de Ponce contra los Santeros de Aguada. Esa noche, un jugador de Aguada intentó entrar al camerino de los Leones, lo que provocó un forcejeo entre jugadores y fanáticos.

“La gente lo sacó de proporción el incidente. Morales indicó que a un jugador la dieron un golpe a la nariz. En realidad el único episodio es el de anoche en Quebradillas”, mencionó Quiñones. 

El BSN todavía no ha informado si, en efecto, redactará una resolución sobre el altercado en Ponce.