DALLAS. Rajon Rondo dice que hablaba todo el tiempo con el entrenador de Dallas, Rick Carlisle, en los primeros días tras su llegada en un canje con Boston, a fin de mejorar las aspiraciones de campeonato de los Mavericks.

En algún momento, la comunicación se desvaneció. Y de repente, ambos se estaban gritando el uno al otro dentro de la cancha, en un exabrupto que le costó a Rondo una suspensión de un partido.

Al cumplir su castigo en la derrota ante Atlanta una noche después de que el episodio ensombreció un triunfo en casa contra Toronto, Rondo regresó el viernes a entrenar y dijo que estaba listo para dejar todo atrás. Carlisle señaló que él ya lo había hecho.

"En términos del tiempo en la NBA, eso pasó hace muchos años luz", señaló Carlisle, quien tendrá a Rondo como titular la noche del sábado, en casa ante Brooklyn.

El episodio generó dudas sobre si Rondo jugará más de media temporada con Dallas, pues está próximo a convertirse en agente libre. Sin embargo, el base ganador de un título con los Celtics en 2008, dejó en claro sus prioridades.

"Haré lo que sea mejor para el equipo, dejaré el corazón en la cancha los próximos 22 juegos para llegar lejos en los playoffs", comentó Rondo.

La primera señal de problemas vino cerca de un mes después del cambio de diciembre, cuando Carlisle dejó a Rondo en la banca en los minutos finales de una derrota por cuatro puntos ante Chicago. Antes de ello, los Mavericks señalaron que habían adquirido a Rondo por sus valores intangibles y su reputación en momentos cruciales.

La transición a Dallas se vio interrumpida cuando Rondo se perdió seis partidos por una fractura del hueso orbital, cerca de su ojo izquierdo. Cuatro encuentros después, comenzó el duelo de gritos con Carlisle, quien molesto pidió una pausa cuando no pudo llamar la atención de Rondo mientras su armador llevaba el balón a la ofensiva.

"Creo que tenía frustración acumulada", comentó Rondo. "Nuestra comunicación al inicio era grandiosa, y ahora no es que no sea grandiosa, sino que tal vez no nos comunicábamos lo suficiente. No creo que vuelva a pasar el resto de la temporada".

Rondo dijo que parte del alto en la comunicación vino cuando Carlisle dedicó más tiempo a incorporar a otro veterano al equipo, el ala-pívot Amare Stoudemire, firmado luego de negociar su salida de los Knicks de Nueva York.

Desde el altercado, Rondo y Carlisle han hablado en varias ocasiones.

"He estado antes en esta situación", señaló el jugador, cuatro veces invitado al Juego de Estrellas. "Todo el mundo tiene una personalidad distinta. No creo que sea un problema. He hablado con prácticamente todos en la organización y todos estamos en la misma página".