Los pobres resultados en el baloncesto a nivel de competencias mundiales de adultos en años recientes ya son harto consabidos.

Por eso, para el secretario emérito de FIBA Américas, el puertorriqueño Jenaro “Tuto” Marchand, su preocupación principal actual no es señalar culpables, sino impulsar los cambios positivos que puedan mejorar nuestras actuaciones mundialistas de cara a los próximos 10 años.

“Todos sabemos qué ha pasado del 2005 hasta hoy. Y desde el 2005 se hicieron advertencias y recomendaciones, aun cuando estaban otros al mando del Baloncesto Superior Nacional y de la Federación de Baloncesto de Puerto Rico. Y todo sigue igual. No tenemos que inventar la pólvora. Ya FIBA ha manifestado las posibles soluciones que se necesitan implementar en Puerto Rico. Es cuestión de querer hacerlo”, indicó Marchand.

Entre esas recomendaciones, figura atemperar el calendario del BSN al resto del mundo.

“Argentina tuvo ese problema en su momento. Jugaba en el invierno, que aquí es verano. Desde que cambió su fecha e hicieron otros ajustes, Argentina es potencia mundial. México lo hizo recientemente y ya comienza a dar frutos. Además, ¿por qué creen que Renaldo Balkman y Ángel Vassallo no jugaron a su nivel? Estaban lesionados gracias al BSN y a su itinerario mortal”.

Marchand también apuntó a la necesidad de democratizar el proceso eleccionario de la Federación, donde no solo la matrícula y un puñado de personas elijan a los directivos, como sucede ahora con los seis miembros de la Junta de Gobierno.

“Tiene que haber una participación más masiva de las personas que trabajan en el baloncesto día a día durante el proceso eleccionario. Y en el programa de trabajo se debe incluir a nuestro banco de talento de ex jugadores y de dirigentes con experiencia que puedan aportar”, señaló Marchand.

Respecto al trabajo en categorías menores, Marchand recalcó la necesidad de regular los calendarios de las diferentes ligas, que según él siguen “al garete”, y de enfatizar en jugar menos y practicar más fundamentos en las edades de infantes y adolescentes.

“Creo que el programa que corre Georgie Rosario con los muchachos de Sub-15 y Sub-17 es lo mejor que ha hecho la federación actual, y debería hacerse de forma más masiva y no con un pequeño grupo. Más aún, hay que trabajar con la enseñanza continua de nuestros técnicos y crear un sistema de juego que sea uniforme para todos, similar a lo que hizo Argentina cuando trajo al yugoslavo (Ranko) Zeravica. Desde entonces, Argentina juega igual, con buenos fundamentos, en todas sus categorías, desde Sub-15 hasta adultos”, sentenció.