Sevilla, España. Con la participación de Carlos Arroyo para el partido de hoy aún en dudas, el Equipo Nacional de Puerto Rico celebró alrededor del mediodía de ayer en esta ciudad su única sesión de entrenamiento del día libre de la acción del Grupo B y un mensaje claro les fue brindado por el entrenador Paco Olmos de cara a su compromiso ante Filipinas esta mañana. 

“No podemos estar pensando en diferentes opciones que no dependen de nosotros si no conseguimos el objetivo prioritario que es ganar el partido Filipinas”, explicó Olmos a este medio al cierre de la sesión de práctica.

Se refería al hecho que cualquier opción de clasificación que permanece como alternativa para los boricuas demanda que no vuelvan a perder en la ronda, es decir, que venzan a Filipinas hoy y a Croacia mañana.

Olmos reconoció que el reto es duro. Lo dice porque admite que en el torneo Puerto Rico no ha jugado a gran nivel aunque considera que están viniendo de menos a más. Además reconoce que Filipinas se ha presentado al torneo con un elenco agresivo y de ofensiva variada por aire y tierra, con juego a distancia y también en la pintura anclado en el desempeño del centro Andray Blatche.

“Será realmente difícil por lo que ha demostrado Filipinas, teniendo balón para ganar tanto ante Grecia como Argentina. Todo pues debido a un estilo de juego diferente al baloncesto convencional”, dijo Olmos para significar porque Filipinas ha sido sorpresa ante potencias del básquet en esta ciudad.

El reto, sin embargo, está claro. Para avanzar hay que ganar irrespectivamente de todo lo otro que pueda suceder. Volver a perder entierra todas las posibilidades.

“No pondremos nuestra mirada en las matemáticas. Nos toca cumplir nuestra parte”, agregó Olmos.

Y en la mente de los jugadores, quienes ayer recibieron la tarde libre a partir de un almuerzo al que les convido la compañía T-Mobile en un lujoso restaurante de esta ciudad, la pequeña ventana que está abierta para que logren revertir su desempeño y suerte en este torneo anima a dar el todo por el todo.

“Lo trataremos porque tenemos mucho orgullo. Nunca nos rendimos. Y buscaremos esas victorias porque sabemos que ellas alegrarán a Puerto Rico y muchos de nuestros críticos nuevamente se montarán en la carreta del súper apoyo cuando las cosas van bien”, destacó Renaldo Balkman.