Cuando uno piensa en el deporte europeo, el fútbol salta a la mente. Pero hay países en el Viejo Continente en el que el baloncesto es rival del balompié como el Deporte Rey.

Ese es el caso de Serbia, actual subcampeón del mundo y que será anfitrión de uno de los tres grupos del Repechaje Olímpico que se disputará del 4 al 10 de julio. Es allí donde Puerto Rico tendrá su última oportunidad para clasificar al baloncesto masculino de los Juegos Olímpicos de Río 2016, cuando se tope con las selecciones de Serbia, Angola, Latvia, Japón y República Checa.

De primera instancia, el grupo luce asequible para Puerto Rico cuando se compara con las otras dos sedes de Filipinas e Italia, que tienen grupos más nivelados. Queda claro que Serbia será el hueso duro de roer, pero no solo por la experimentada y talentosa plantilla que poseen.

Los serbios recibirán a Puerto Rico y al resto de las selecciones en el Kombank Arena en Belgrado, una instalación con 25,000 personas. Esa capacidad convierte al coliseo en una de las instalaciones deportivas bajo techo más grandes de Europa.

Y, con toda seguridad y juzgando por pasadas experiencias, cada uno de los 25,000 asientos estarán llenos para los partidos del Repechaje. Los fanáticos serbios han demostrado ser unos de los más intensos del baloncesto mundial, cantando, ondeando banderas y brincando sin cesar a través de todo el partido.

Es un ambiente al cual los serbios ya están acostumbrados, pero que le podría resultar incómodo a cualquier rival que no acostumbra a jugar en un “infierno” parecido.

Incluso, la prensa estadounidense reaccionó sorprendida a la manera en la que Serbia celebró su subcampeonato tras perder la Copa del Mundo de la FIBA en el 2014 contra Estados Unidos. La celebración en Belgrado fue, simplemente, apoteósica.

Puerto Rico no tendrá que esperar mucho para jugar contra Serbia, pues el partido entre ambos será en la jornada inaugural el 4 de julio. Si Puerto Rico sale del Grupo A –que comparte con Serbia y Angola; adelantan los primeros dos– podría volver a toparse con los serbios en una hipotética final por el pase a Río 2016.

A continuación, algunos ejemplos de la fanaticada de Serbia en acción mientras juega su equipo nacional de baloncesto.