San Juan.- El pelotero puertorriqueño Carlos Correa se ha convertido en el nuevo fenómeno en las Grandes Ligas, al lograr varias marcas históricas en tan solo diez juegos desde que los Astros de Houston lo ascendieron al máximo nivel del béisbol en Estados Unidos.

Y es que según aseguró hoy a Efe el historiador y especialista de estadísticas de béisbol Jossie Alvarado, el jugador de tan sólo veinte años de edad ha sido descrito por la prensa estadounidense como "un fenómeno", no solo por lo que ha logrado en sus primeros diez partidos, sino por todo lo que ha conseguido en este deporte.

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"No ha habido un arranque de algún puertorriqueño en las Grandes Ligas con tanto impacto que el de Correa. Y todo esto es debido a la ejecución mediática y lo rápido que nos enteramos de las noticias de sus marcas alcanzadas", aseguró Alvarado.

Correa debutó en el "circuito grande" el pasado 8 de junio. Ese día dio su primer imparable y remolcó su primer carrera ante los Medias Blancas de Chicago en un partido al que asistió su familia y varias amistades.

Ese día, Correa -el único pelotero en las Grandes Ligas con ese apellido- se convirtió también en el jugador regular más joven en la Liga Americana.

Desde su debut, el parador en corto se ha destacado en la ofensiva al batear para promedio de .349 (15 imparables en 49 turnos al bate), disparar tres cuadrangulares, remolcar siete carreras y estafar cuatro bases, entre ellas, tres el jueves pasado en la victoria de los Astros 8-4 sobre los Rockies de Colorado.

Las tres almohadillas robadas en un sólo partido convirtieron a Correa, de 20 años y 269 días de edad en ese momento, en el segundo pelotero más joven en los pasados cien años, después del inmortal Rickey Henderson en 1979, quien lo hizo a sus 20 años y 241 días de vida.

Esa gesta también le convirtió en el pelotero más joven desde 1914 en robarse al menos tres bases y conectar para extra bases (doble) en un mismo partido, destacó Alvarado.

Igualmente, llamó la atención sobre el hecho de que es el primer pelotero -al menos en los pasados cien años- en pegar tres cuadrangulares y estafarse cuatro almohadillas en sus primeros diez juegos en las Grandes Ligas.

Los quince imparables conectados por Correa en sus primeros diez partidos lo empataron con otros dos puertorriqueños, José Alberto "Coco" Laboy y Gilberto Flores, en completar esa gesta. Todos ellos nacieron en Ponce, segundo municipio más importante de Puerto Rico.

"El camino de Correa es largo y con muchos retos: mantenerse saludable y enfocado. Estamos ante la presencia de un gran jugador de impacto", aseguró Alvarado sobre el primer seleccionado del Sorteo de Novatos de 2012 tras graduarse de la Puerto Rico Baseball Academy.

Luego de terminar su carrera escolar, Correa estuvo tres años teniendo destacados años ofensivos en las Ligas Menores con varios equipos, entre ellos, Corpus Christi y Fresno, en Doble A y Triple, respectivamente, hasta que el pasado día 7 le notificaron que había sido llamado por los Astros para ir a las Grandes Ligas.

Correa empezó este año con el equipo de Corpus Christi en Doble A hasta que fue ascendido a Fresno en Triple A, donde llevaba un promedio de ,276 con tres cuadrangulares y doce carreras impulsadas en 24 partidos.

Totalizó en Doble A y Triple promedio de ,335, con 21 dobles, 10 cuadrangulares, 44 carreras empujadas y 18 bases robadas en 52 desafíos.

Se espera además que Correa sea el parador en corto regular de Puerto Rico en el próximo Clásico Mundial de Béisbol 2017.

En ese equipo también se espera que estén George Springer y Marcus Stroman (ambos con madres puertorriqueñas), así como los boricuas Christian Colón, Enrique "Kike" Hernández, los receptores Christian Vázquez y Roberto Pérez, el inicialista Kennys Vargas y el intermedista Javier Báez.

Todos estos pelotero debutaron en la temporada pasada, un año después de que lo hicieran otros siete puertorriqueños: Nolan Arenado, José De La Torre, Neftalí Soto, Jonathan Díaz, Reymond Fuentes, Johnny Monell y Juan Centeno.