Una extensa investigación del diario The Kansas City Star reveló que el último año en la vida del fenecido derecho fue un caos casi novelesco.

Según el diario, la última vez que habló con su madre fue el 14 de febrero de 2016, unas semanas después de que este se casara, el 26 de enero de 2016, con María del Pilar Sangiovanni, una unión no aprobada por la familia del pelotero.

Dos meses antes, en noviembre 2015, Sangiovanni, que había salido con Bautista, se divorció de un extranjero con el cual admitió que se casó por negocios, para casarse con Ventura.

Cinco días después de la boda Sangiovanni abortó mellizos.

En el reportaje, la madre de Ventura, Marisol Hernández, culpó a Sangiovanni de haberle mentido a su hijo y alejarlo de la familia.

La viuda relató que en marzo de 2016 Ventura tuvo que ser hospitalizado en Arizona durante el spring training de los Reales luego de que este ingiriera 10 pastillas de Benadryl en un intento de suicidio.

Ese mismo mes, según el diario, dos hombres fueron a buscar a Ventura a su hogar y le dijeron a Sangiovanni que saliera que lo iban a matar, antes de escuchar disparos, aunque nunca se hallaron balas.

Un mes más tarde, en Kansas City, una camioneta de Ventura fue vandalizada en el parking de su apartamento. Le dejaron un mensaje: “Volveremos por ti”.