Cayey. A los Bravos de Cidra les encanta jugar con las espaldas contra la pared. Así es que demuestran su bravura. 

Los campeones nacionales, otra vez, vinieron de atrás para vencer esta noche, 6-2, a los Maratonistas de Coamo en el cuarto partido de la serie final de la Doble A celebrado en el estadio Pedro Montañez en Cayey frente a 3,357 aficionados. Con el triunfo, Cidra le devolvió el favor a Coamo y barrió los dos juegos del fin de semana, para provocar, por lo menos, que la serie llegue a seis juegos. 

“Los muchachos le gusta esta clase de juego, cuando se ven atrás y heridos es que ellos juegan mucha pelota”, expresó Juanito Rodríguez, dirigente de los Bravos. 

El quinto juego será el viernes en el estadio Yldefonso Solá Morales en Caguas, mientras que el sexto será de vuelta en Cayey el sábado. 

“Mientras más jugamos corridos, mejor nos ponemos. Cuando estamos atrás, mejor es el equipo de Cidra”, agregó el entrenador de los monarcas nacionales, que el miércoles decidirá su lanzador para el quinto juego.

Como ha sido la costumbre en esta serie, los Maratonistas fueron los primeros en anotar irse al frente, 2-0, en la misma primera entrada.

Sin embargo, los Bravos guardaron lo mejor para la entrada de la suerte frente al relevista de Coamo Reinaldo Ortiz. Luego de un out en la parte alta de la séptima, y con dos en base, Edgardo Hernández azotó una línea al jardín izquierdo para empujar la primera carrera de la visita. 

“Trajimos de emergente a Alex Colón, quien encendió la chispa y ahí ellos empezaron a jugar erráticos y los cogimos ahí”, indicó Rodríguez.

Los Bravos llenaron las bases, y Juan Carlos Díaz logró un hit en el cuadro, y el antesalista de Coamo, Kelvin Alvarado cometió su segundo error del encuentro que permitió el empate, 2-2, además de que los cidreños seguían con las almohadillas congestionadas.  

Los Maratonistas trajeron a la loma a Gilberto González, quien abrió su actuación con pelotazo sobre César Velázquez que llevó al plato a Hernández para la ventaja definitiva, 3-2, para Cidra. 

“Los muchachos no están pacientes (en el plato). No estamos ejecutando, ni tocando, fallamos el hit and run. Los errores que hicimos fueron costosos, ahí está el juego”, indicó por su parte Adalberto “Berto” Pena, dirigente de los Maratonistas. 

Los Bravos agregaron otras tres carreras en la octava entrada para sentenciar el encuentro para el goce de la afición de Cidra que se dio cita al estadio.

Luego de dos boletos  y pelotazo por parte del lanzador iniciador de Cidra, Héctor Acevedo, el guardabosque derecho Cristian Santiago sonó un sencillo por el jardín central para poner a Coamo arriba, 2-0. 

La temprana ventaja de Coamo sirvió para que el iniciador de los Maratonistas, Iván Maldonado, se sintiera más cómodo en la lomita, en donde estuvo sólido al retirar 17 de 20 bateadores desde la segunda entrada hasta la sexta. 

Acevedo imitó a Maldonado y el encuentro se convirtió en un verdadero duelo de pitcheo entre ambos. Luego de su lento inicio, el derecho de los Bravos controló la ofensiva coameña al retirar 15 de 18 bateadores, incluyendo cuatro abanicados. 

No obstante, la séptima entrada marcó el desenlace del encuentro y dejó la final como una serie al mejor de tres juegos. 

“Vamos a seguir con nuestro juego, que es lo que nos ha traído hasta aquí. No podemos quitarnos, hay que seguir jugando pelota. Esta serie va a depender de quien ejecute mejor en el terreno de juego”, sentenció Peña.