El receptor Mervyl ‘M.J’ Meléndez y el campocorto Chris Seise se han sumado a la l ista de jugadores boricuas que podrían ser llamados en las primeras dos rondas del sorteo de Novatos de Grandes Ligas que se efectuará a partir del 12 de junio.

Ambos peloteros, nacidos en el estado de la Florida y de padres puertorriqueños, fueron colocados, por mlb.com, entre los mejores 100 prospectos. Seise fue ubicado en la posición número 40, mientras que Meléndez fue colocado en la posición 54. 

Entre medio de ellos se encuentra el maunabeño Heliot Ramos en el puesto número 43 en el listado.

Por otro lado, el portal Baseball America ubicó a Meléndez en la posición 50 y a Seise en la 66. Ramos aparece en la 24.

Ambos peloteros han sido descritos como sólidos jugadores defensivos en sus respectivas posiciones con la capacidad de batear.

En escuela superior, Seise batea para promedio de .413 con 24 carreras remolcadas y 16 batazos extrabases, mientras que Meléndez batea para promedio de .407 con siete cuadrangulares y 25 carreras remolcadas. 

“Me siento orgulloso de estar entre los mejores 100 prospectos de la nación. Eso significa que el trabajo realizado por los pasados cuatro años ha rendido frutos. Mi padre y yo trabajamos de la forma correcta”, dijo Seise a Primera Hora vía telefónica desde Florida.

Seise demostró desde muy temprana edad una habilidad natural para jugar el béisbol, compartió su progenitora. 

“Desde pequeño todos hablaban de las habilidades que él tenía. Ha trabajado fuertemente para ser un mejor atleta año tras año. Ha entrenado todos los días después de la escuela. También ha sacrificado su verano. Mientras todos los jóvenes pasaban el verano de vacaciones, Chris decidió irse a entrenar. Salía todos los días con su papá a trabajar las áreas que entendía que debía mejorar”, explicó su madre Damaris Molina, natural de Cataño.

Al igual que Seise, Meléndez mostró sus destrezas en el juego desde su niñez. El joven -natural de Daytona Beach- ha estado en los parques desde sus primeros meses de vida. 

Meléndez es hijo del dirigente del equipo de béisbol de la Universidad Internacional de la Florida (FIU, por sus siglas en inglés). En el pasado, Meléndez trabajó por 12 años como piloto del equipo de la Universidad de Bethune-Cookman y posteriormente pasó a la Universidad del Estado de Alabama.

“M.J. mostraba una habilidad desde pequeño en lo más importante del béisbol, los fundamentos del juego”, aseguró Meléndez, padre. “Ha sido un buen estudiante de las destrezas que hay que tener en el juego. Eso, unido a la habilidad natural y al fundamento que tiene, lo ha hecho crecer en el deporte”.

El carolinense recordó cómo a los cuatro años de edad su hijo se ponía en cuclillas y se ponía la gorra al revés como lo hacen los receptores. 

“Él nació para ser catcher. Incluso, en una Navidad, él pidió que su regalo fuera todo el equipo necesario para estar detrás del plato. Creo que al igual que como muchos otros puertorriqueños, él lleva la posición en la sangre”, aseguró Meléndez, padre, quien era admirador del exreceptor Benito Santiago.

“Cuando tenía ocho o nueve años, mi papá me enseñó como lanzar la bola a la segunda base estando de rodillas en el plato. Luego me di cuenta que eso fue porque mi papá amaba la forma en que él catcheaba”, dijo MJ a USA Today recientemente.