La noche del 20 de junio del 1991 Iván Rodríguez debutó en las Grandes Ligas con los Rangers de Texas.

Eso fue un día como ayer hace 26 años.

Ese día comenzó la historia de Iván Rodríguez en su carrera de 21 temporadas en las Grandes Ligas, la que será reconocida el 30 de julio próximo con su exaltación al Salón de la Fama de las Grandes.

Aquella noche, el joven de 19 años de Vega Baja se convirtió en el jugador más joven en las historia de las Grandes Ligas en recibir un partido. 

Lo celebró con dos corredores fusilados en segunda base, comenzando con su compatriota Joey Cora, quien fue el primero de los 661 corredores que Rodríguez sacó en su carrera.

“Este Rodríguez tiene un brazalete”, dijo entonces el comentarista para televisión de los Rangers.

Ese día, Rodríguez comenzó el partido, el que abrió el derecho Kevin Brown. Fue colocado noveno en la alineación, en la que el carolinense Rubén ‘Indio’ Sierra era el tercer bate y jardinero derecho, el vegabajeño Juan ‘Igor’ González era el séptimo bate y jardinero central y el humacaeño Mario ‘Puruquito’ Díaz era el octavo bate y campo corto.

No solamente lució a la defensiva ese día quien posteriormente fue apodado Pudge, sino que también logró esa misma noche su primero de 2,844 imparables que conectó en su carrera y sus primeras dos de las 1,332 carreras que impulsó.

Ese momento ocurrió en la novena entrada, cuando los rivales White Sox de Chicago ganaban 3-2 el partido jugado en estadio Comiskey Park II de la Ciudad de los Vientos. De hecho, en la receptoría de los White Son estaba Carlton Fisk, quien fue exaltado en el Salón de la Fama en el 2000.

Cinco turnos antes del histórico imparable de Rodríguez, Sierra pegó un jonrón de dos carreras para darle la ventaja a los Rangers por 4-3. Tres turnos antes, González pegó su tercer imparable el juego, incluyendo un jonrón solitario en la octava entrada. Y un turno antes. Díaz dio una línea de out.

Entonces, Rodríguez entró a la caja de bateó para su cuatro turno del juego, éste con González en tercera y Steve Buechele en segunda, y le pegó en conteo dos y uno el histórico sencillo al dominicano Mélido Pérez, éste impulsor de la sexta y séptima carrera de la eventual victoria 7-3.

Así, nada más y nada menos, comenzó la carrera del cuarto ‘salón de la fama’ boricua.