San Francisco.- Orlando Cepeda caminó entre las estatuas de bronce de otros camaradas suyos que fueron honrados por los Gigantes de San Francisco y pensó que quizá algún día él también sería recordado de esa manera.

"Algún día la mía estará allí. No se lo dije a nadie, me lo dije a mí mismo", recordó Cepeda con una sonrisa.

La imagen de Cepeda fue fundida en bronce y acompañará a otros peloteros del salón de la Fama como Willie Mays, Willie McCovey y el dominicano Juan Marichal.

La estatua del puertorriqueño Cepeda será develada hoy, sábado, por la tarde después de una fiesta latina que se celebrará frente al estadio de los Gigantes antes de que se enfrenten a los Piratas de Pittsburgh. Los Gigantes honrarán el día especial de Cepeda usando una camisola con el nombre del equipo en español: "GIGANTES".

"Es un gran honor", dijo Cepeda ayer, viernes, sentado junto a Vera Clemente, viuda de su amigo durante mucho tiempo y compatriota Roberto Clemente.

"Nunca me vino a la mente que algún día sería develada una estatua en ningún estadio, especialmente en San Francisco, ciudad que amo tanto. Es un parque de pelota hermoso. También, estar junto a Willie Mays, Willie McCovey y Juan Marichal es un sentimiento grandioso. Soy muy afortunado. Tengo mucha suerte de haber nacido con la habilidad de jugar béisbol", agregó.

Cepeda pasó con los Gigantes poco más de los primeros ocho años de sus 17 de carrera en Grandes Ligas, comenzando en 1958 cuando el club se mudó a la costa oeste desde Nueva York.

Los Gigantes han estado celebrando todo el año su 50 aniversario en San Francisco, y honrar a Cepeda es otra forma de hacerlo.

Cepeda, siguiendo los pasos de Clemente, estuvo entre los pioneros peloteros profesionales salidos de Puerto Rico. Apodado "Cha Cha" o "Baby Bull", Cepeda fue firmado por los Gigantes de Nueva York en 1955 y en su carrera en ligas mayores tuvo promedio de bateo de .297 con 379 cuadrangulares y 1.365 carreras producidas en 2.124 juegos.

Fue Novato del Año de la Liga Nacional en 1958, Jugador Más Valioso de la misma en 1967 y fue seleccionado para participar en 11 Juegos de Estrellas, aunque sólo lo hizo en nueve.

Su estatua fue colocada ayer, pero aún está cubierta. Cepeda estaba emocionado porque será una sorpresa hoy, sábado, aunque conversó con el escultor William Behrends sobre el diseño de la misma durante el último par de años.