Guadalajara, México. Aun con sus problemas, el pitcheo rindió buenas entradas, la ofensiva produjo y Puerto Rico consiguió su segundo triunfo en el Clásico Mundial de Béisbol 2017, al derrotar a México con marcador de 9-4 sobre el terreno del estadio Charros de Jalisco.

En esta ocasión la noche fue de Francisco Lindor y Javier Báez, quienes remolcaron seis de las nueve carreras de Puerto Rico con tres cuadrangulares y un doble entre ambos, mientras que Jorge López realizó una gran labor de 4.1 entradas, en las que cedió solo dos hits, una carrera, otorgó dos boletos y ponchó a cinco.

“Cuando yo doy jonrones en un juego es que el parque es bueno”, dijo Lindor con una sonrisa en la conferencia de prensa posterior al partido. “Cualquier victoria es buena, pero con esta aseguramos algo. Todavía no se ha terminado el trabajo aquí en México. Mañana (domingo) tenemos que venir a jugar fuerte pase lo que pase y que sea lo que Dios quiera”.

Con el triunfo, que los colocó en 2-0 en el Grupo D, Puerto Rico ya piensa en la segunda ronda de San Diego. México cayó a 0-2 y está al borde de la eliminación. Pero con Italia y Venezuela en 1-1, la jornada dominical podría provocar un triple empate en 2-1 en el que Puerto Rico llevaría ventaja pues un criterio a utilizarse sería la cantidad de carreras permitidas.

Eso sería solo en caso de que Puerto Rico perdiese con Italia en el partido del domingo a las 3:30 p.m. y Venezuela le gane a México en el partido nocturno. Si Puerto Rico le gana a Italia, no tendría que esperar por el resultado de las 10:00 p.m.

“Desde el primer día siento que el equipo tiene lo que se necesita tener para ganar un campeonato. La química está ahí, el pitcheo, el bateo… es cuestión de jugar la pelota de forma correcta”, agregó Lindor.

Por su parte, el dirigente boricua, Edwin Rodríguez, adelantó que para el encuentro del domingo habrá algunos cambios en la alineación, pero que el enfoque será el mismo: jugar como si fuese el primer juego e ir pitcheo a pitcheo.

“Tenemos un equipo joven,  talentoso. Ayer (viernes) Carlos Correa se encargó de la ofensiva, igual que TJ Rivera, y esta noche pues Francisco Lindor y Javier Báez se encargaron de la ofensiva y era de esperarse. Tenemos un equipo que puede contribuir en la ofensiva y en la defensiva”, dijo el dirigente ponceño.

“Y en cuanto a Héctor Santiago, tuvo una salida en la que estuvo atrás en el conteo. Los lanzamientos secundarios no le estaban funcionando y yo creo que por eso fue que se metió un poco en problemas, pero pudo salir de ahí y el ‘bullpen’, que es el fuerte de nosotros, en la séptima, octava y novena pudo hacerse cargo del juego”, agregó Rodríguez.

Santiago relevó a López en la quinta con el partido 4-1 en ventaja para Puerto Rico. Dos de esas surgieron en la misma primera entrada con el primer cuadrangular de Lindor con Ángel Pagán en tránsito. En la tercera. Carlos Beltrán remolcó otra con un hit que hizo cruzar el plato a Pagán y en la quinta, Correa pegó un fly de sacrificio que impulsó a Reymond Fuentes desde la antesala.

El zurdo Santiago trabajó 2.2 entradas y no fue hasta la séptima, después del segundo vuelacercas de Lindor, con el que la pizarra se puso 5-1, que se metió en aprietos.

Santiago permitió cuatro hits y cometió un ‘wild pitch’ que acercaron a los mexicanos en la pizarra 5-4 con tres vueltas en ese episodio.

No obstante, Santiago logró retirar a Alex Verdugo sin daños adicionales. La octava fue de Joseph Colón, quien tiró dos tercios y cedió un hit, y Alex Claudio, quien tiró un tercio en cero.

El partido se abrió en la alta de la novena cuando Lindor pegó su tercer hit de la noche, un sencillo al central, y Beltrán, en medio de un batallado turno, recibió base por bolas luego de que el receptor mexicano, Xorge Carrillo, dejó caer un fácil batazo de foul de Beltrán que lo hubiese eliminado.

Yadier Molina, entonces, hizo pagar el error de su contraparte y sacudió hit al central que remolcó a Lindor desde segunda para la sexta carrera boricua y estableciendo el escenario para el vuelacercas de Javier Báez, que puso el partido 9-4 y silenció las activas gradas del estadio Charros de Jalisco.

Edwin Díaz se hizo cargo de la novena para cerrar el encuentro.

El dirigente de México, Edgar González, se mostró molesto con el arbitraje, aunque le dio crédito a la ejecución de los puertorriqueños.

“No se pueden llamar ‘strikes’ los pitcheos que estamos llamando que son ponches. No las dan en contra, no entiendo por qué no se las dan en contra. Luego vimos algunos ‘pitcheos’ en la tele que fueron ‘strike’”, comenzó diciendo González.

“No quiere decir que por eso perdimos, no estoy diciendo eso, pero se nos hace difícil ganarle a equipos tan buenos como Puerto Rico si el ‘umpire’ está quitando para unos”, agregó. “Siento que ellos jugaron bien. No quiero quitarle crédito a Puerto Rico, pero creo que las cosas pudieron ser diferentes”.

“Al final, todos estamos vivos. Si le ganamos a Venezuela (el domingo) y Puerto Rico le gana a Italia, estamos para el desempate”, dijo González.

El partido se vio marcado por un incidente violento en las gradas que detuvo el partido por unos minutos al finalizar la octava entrada, el cual provocó que el banco de Puerto Rico se vaciara y hasta los integrantes del ‘bullpen’ bajaran hasta la línea de tercera base para ver lo que sucedía.

En esa zona se encontraban fanáticos de Puerto Rico y los familiares de los jugadores, incluyendo a la madre de Báez. Este dijo que se sintió intranquilo por unos momentos hasta que sus familiares le indicaron que todo estaba bien, pero que no consideró brincar hacia el público.

Lindor finalizó la noche bateando de  5-3 con tres remolcadas y tres anotadas. Báez se fue de 5-2 con doble y jonrón, tres impulsadas y una anotada. Beltrán bateó de 4-3 con una impulsada y una anotada. Pagán de 4-2 y Eddie Rosario de 5-2.