El serpentinero Jonathan Sánchez  regresará a los campos de entrenamiento primaverales a enseñarle a  los Reales de Kansas City de qué madera está hecho. 

El sabaneño, de 34 años, firmó un contrato de liga menor con invitación a los campos de entrenamiento a mediados de  diciembre con el equipo con el que tuvo un  apretado desempeño en el 2012.

“Me siento bien porque es un equipo con el que no lucí bien cuando  San Francisco me cambió. Los Gigantes me enviaron a Kansas City. No tuve buena actuación allá y me cambiaron a Colorado”, recordó Sánchez al conversar con  Primera Hora.

Sánchez llegó a las  filas de los Reales en un canje en noviembre de 2011  que envió a los Gigantes al guardabosques dominicano    Melky Cabrera.

En Kansas City, el zurdo  compiló marca de 1-6 y una alta efectividad de 7.76 en 12 aperturas hasta el 3 de agosto.

Posterior a eso  fue designado a las  Ligas Menores y canjeado a los Rockies de Colorado por el  lanzador derecho Jeremy Guthrie. 

“Esta oportunidad  me va a dar el break de enseñarle a ellos la clase de pitcher que yo soy y he sido. He trabajado para ello. Me siento bien y estoy contento porque voy para allá”, continuó Sánchez.

El interés de parte de los Reales es genuino 

El  interés de la gerencia de los Reales por Sánchez comenzó luego que  el coach de los Indios de Mayagüez, Alex de la Cruz, hablara del buen desempeño del zurdo  con la tribu en la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente.

“El que hizo el contacto fue Alex de la Cruz, que es el pitching coach de nosotros. Él puso la voz allá. Un día me dijo: ‘quieres irte para Kansas City’ y yo le respondí: ‘yo me quiero ir para donde sea’. Después que me den la oportunidad, yo voy a cualquier lugar”, explicó Sánchez.

El zurdo terminó la temporada regular como líder en victorias de la liga invernal con un récord de 5-2 y  fue protagonista  de un empate en la tercera posición en ponches con Reinier Roibal, de los Cangrejeros de Santurce,  luego de sacar a 39 bateadores por esa vía.

Su efectividad fue de 2.75 luego de permitir 13 carreras limpias en 36 entradas lanzadas en  nueve partidos,  ocho de ellos en el rol de  abridor.

Según mlb.com, los Reales enviaron a su director de escuchas profesionales, Gene Watson, para  evaluar  el desempeño  de Sánchez en Puerto Rico. Pero él no fue la única persona  que vino a verlo lanzar. 

Primera Hora estuvo presente en varias salidas que tuvo Sánchez   y la presencia de escuchas en las gradas   de los estadios   no se podían  obviar. 

“Es una oportunidad para él.    Nunca se sabe. Ya veremos”, dijo el gerente general de los Reales,    Dayton Moore, a mlb.com sobre Sánchez, quien según los  informes del equipo hizo  lanzamientos entre las 92 y las 95 millas por hora.

Este sería el segundo intento de Sánchez de regresar a la Gran Carpa desde que jugó por última vez en las Mayores, con los Piratas de Pittsburgh, en el 2013.

“El año pasado Cincinnati me dio la oportunidad y la forma en cómo bregaron conmigo no fue la mejor. Me dejaron libre y las razones para hacerlo no fueron buenas. Sin embargo, yo seguí positivo. Las cosas buenas siempre van a venir y, con Dios por delante, uno siempre puede”, manifestó Sánchez. 

Sus atributos  como lanzadores son difíciles de pasar por alto. Especialmente cuando se lanza a las velocidades registradas en el informe de los Reales y   se cuenta con un  resumé de   ocho temporadas en las Grandes Ligas, un juego  sin hits ni carreras ante los Padres de San Diego en el 2009 y un anillo de Serie Mundial con los Gigantes en el 2010.

“Mira, ya yo firmé y ahora me estoy preparando para los campos de entrenamiento. Me voy entre el 8 y  10 de febrero. Me voy a quedar en Puerto Rico  este mes para seguir trabajando. Todavía me quedan par de salidas en la liga y  las quiero terminar para irme para allá bien entrenado”, prosiguió  Sánchez.

Anhela  volver  al Clásico

Sánchez fue parte del cuerpo monticular del   equipo de Puerto Rico en el Clásico Mundial de Béisbol de 2009 y desde ese entonces siente el deseo de volver a hacerlo. Pero esta vez necesitará el permiso de su organización. 

“En el pasado clásico quería representar a Puerto Rico, pero mi futuro con los Piratas estaba en juego y decidí  quedarme en ese momento. Este año voy con el mismo plan. Quiero hacer el equipo, veo el chance y si el equipo me da permiso; voy (al Clásico Mundial). Si sucede la misma situación que con los Piratas, no podré hacerlo. Pero, mi sueño es volver a representar a Puerto Rico en el Clásico”, aseguró Sánchez.