Kansas City, Missouri.— Madison Bumgarner estaba calentando esta semana en el Estadio Kauffman, relajándose con sus compañeros de equipo de San Francisco cerca del dugout, cuando Tim Hudson y Michael Morse se acercaron por detrás y despeinaron el largo y desaliñado cabello del lanzador.

Bumgarner giró rápidamente y luchó en broma con sus amigos.

Ellos fueron los únicos que pudieron hacer contacto a Bumgarner en esta Serie Mundial.

"Era inútil", reconoció el piloto de los Reales Ned Yost.

El zurdo de 25 años coronó una histórica actuación al ser elegido el jugador más valioso de la Serie el miércoles por la noche, luego de lanzar cinco entradas en blanco como relevista del séptimo partido y dominar a los Reales de Kansas City con pizarra de 3-2.

Momentos después de retirar a Salvador Pérez con un elevado de foul con un corredor en tercera para el último out, Bumgarner insistía que no estaba cansado. Media hora después, cambió el casete.

"¿Saben qué? No puedo mentirles más. Estoy fundido", dijo Bumgarner, quien se apuntó el rescate con su labor.

Después de llevarse la victoria en el primer partido de la serie ante los Reales con una labor impresionante en siete innings, Bumgarner blanqueó al rival en el quinto encuentro. Y cuando los Reales extendieron el Clásico de Otoño a un duelo decisivo, no había duda de que el chico llamado MadBum sería enviado al montículo una vez más.

¿Pero cinco innings? ¿Quién lo habría imaginado?

"Innings, no pensaba en innings ni en conteo de lanzamientos. Sólo pensaba en sacar outs, y seguir sacando outs hasta que ya no pudiera hacerlo y necesitáramos a alguien más", dijo Bumgarner. "Afortunadamente logramos sacar algunas entradas rápido y pude mantenerme en el juego".

Bumgarner le sacó más lustre a sus credenciales en la Serie Mundial, dueño de estadísticas superlativas: foja de 5-0, efectividad de 0.25 y tres anillos de campeón. En 36 innings, ha permitido apenas una carrera y 14 hits, con 31 ponches y cinco boletos.

"Es un muchacho muy humilde", dijo el mánager de los Gigantes Bruce Bochy. "Lo exprimimos al máximo. Lo que ha hecho es histórico, realmente asombroso".