San Juan.- Puerto Rico y la República Dominicana cerrarán mañana la jornada del grupo C del Clásico Mundial de Béisbol en lo que será otro de los esperados partidos entre una de las rivalidades más conocidas del deporte latinoamericano.

Las hermanas islas caribeñas presentarán un desafío de gran envergadura en el estadio Hiram Bithorn de San Juan, el cual estará completamente llenos, mayormente de puertorriqueños, pero los dominicanos harán su caracterizado bullicio con la tambora.

Los lanzadores abridores serán el zurdo Wandy Rodríguez, que irá por la República Dominicana, mientras que Orlando Román se espera que lance por Puerto Rico.

Rodríguez dijo que su plan de juego ante los boricuas, será tratar de tener el mejor control en sus lanzamientos y depositarlos en el mejor lugar del guante del receptor Carlos Santana.

Puerto Rico tiene en su alineación algunos de los bateadores más destacados en las Grandes Ligas, como Carlos Beltrán, Yadier Molina y Alexis Ríos.

Los dominicanos, mientras tanto, llegaron a su hermana isla con un grupo de algunos de los toleteros más sobresalientes, como Robinson Canó, Edwin Encarnación, Nelson Cruz y Hanley Ramírez.

La República Dominicana buscará superar la frustrante eliminación en el pasado del Clásico del 2009 ante la inferior selección de Holanda, la cual juega esta semana en la segunda ronda del torneo.

En aquel entonces, los holandeses derrotaron a los dominicanos en dos ocasiones, 3-2 y 2-1.

Los boricuas, mientras tanto, perdieron a dos de sus lanzadores ases, Javier Vázquez y Héctor Santiago.

Vázquez trató de integrarse a la selección puertorriqueña después de haber anunciado su retiro y regresar a jugar en la liga invernal de la isla.

Santiago, por su parte, declinó unirse al equipo para buscar un puesto como abridor con los Medias Blancas de Chicago.

Ambas selecciones solo se habían enfrentado en la primera edición del Clásico, en el 2006, donde Puerto Rico apabulló a la República Dominicana, 7-1.