Una temporada  de altibajos para los peloteros puertorriqueños entra a su segunda mitad esta tarde.

Y dentro del drama global que siempre surge en las Grandes Ligas, y que este año incluye a equipos como Cachorros, Nacionales, Mets, Gigantes, Vigilantes, Indios y otros, hay ciertas historias boricuas a las que  no debemos perderle ni pie ni pisada.

Beltrán y los Yankees

El veterano manatieño Carlos Beltrán necesita una sola carrera impulsada para llegar a las 1,500, marca que seguiría agregando a su excelso expediente en las Mayores.

Sería esta su tercera marca personal de la campaña, pues ya arribó a los 400 jonrones y 2,500 hits.

Incluso, en remolcadas se podría convertir en el mejor boricua de la historia, rompiendo la marca de su amigo Carlos Delgado (1,512).

Mientras tanto, con sus 411 vuelacercas ya es el tercero entre los boricuas, superado solo por Juan “Igor” González (434) y Delgado (473).

En inatrapables, solo tres borincanos acumularon más: Roberto Clemente (3,000), Iván Rodríguez (2,844) y Roberto Alomar (2,724).

Y todo eso lo intentará en medio de rumores de que los Yankees se darán por vencidos y lo cambiarán a él y a otros. 

Lindor y los Indios

El campocorto cagüeño Francisco Lindor  y su equipo de mercado pequeño, con poco ruido, cerraron la primera mitad de la campaña con cuatro juegos y medio de ventaja en el tope de una División Central de la Americana, que cuenta con los campeones de la Serie Mundial, los Reales, los siempre peligrosos Tigres de Detroit y los Medias Blancas de Chicago.

Segundo en las votaciones para Novato del Año de la Americana en 2015,  Lindor es una de las bujías indígenas con .306, 10 jonrones, 20 dobles y 45 remolcadas.

Hasta ahora, Lindor ha tenido, tal vez, la mejor  temporada ofensiva entre los puertorriqueños, y Cleveland espera extender las celebraciones del reciente campeonato de la NBA.

Correa y los Astros

Dicen que el segundo año en las Mayores es de los más difíciles, pues ya los lanzadores conocen tus puntos débiles y lo aprovechan.

Carlos Correa, quien se vio sumido en un slump a principios de campaña, enderezó y ya cuenta con 14 jonrones, 17 dobles y 55 remolcadas.

Igualmente, los Astros subieron desde casi el sótano del Oeste de la Americana y ya acechan a los Vigilantes por el puntero de la división. 

Correa está rumbo a igualar o mejorar sus números del año de rookie (22 jonrones, 22 dobles y  68 empujadas), aunque habría que ver si una explosiva segunda mitad lo coloca cerca de los que ansiaba desde los campamentos primaverales: 40-40.

Yadi y los Cardenales

Algo inusual se ha visto en la Central de la Nacional este año: los Cardenales no están primeros.

Al iniciar la segunda mitad, la ‘buena’  primera mitad que tuvieron no es suficiente bajo los estándares de una organización  constantemente  ganadora.

Y como líder del equipo, Yadier  Molina deberá estar en el centro de los esfuerzos de San Luis por eliminar el espacio que les separa de los líderes, Cachorros de Chicago.

El bateo de Molina ha estado algo bajo este año, con dos jonrones, 16 dobles, 28 remolcadas y promedio de .259. Veremos si calienta en la fase final.

La Máquina y los demás

José  Berríos debutó en las Mayores antes de que finalizara el primer mes de campaña, pero tras cuatro salidas fue devuelto a las menores con  efectividad de 10.20, 12 bases por bolas y 20 ponchetes en 15 entradas de actuación.

Desde entonces, se dedicó a mejorar en AAA, en donde ha acumulado 8-4, 2.59 y los oponentes le batean .196.

Impresionó  en su actuación en el reciente Juego de Estrellas de AAA con pleno dominio de sus pitcheos offspeed y su recta entre las 93 y 95 mph, y con Minnesota sumido en el sótano de la Central de la Americana, debe ser muy probable verlo pronto de vuelta en los Mellizos.

Minnesota además subió de vuelta a Eddie Rosario y a Kennys Vargas. Además cuenta con Juan Centeno.

Faltaría por ver si regresan al circo grande figuras como Yadiel Rivera y Jorge López (Milwaukee), Johnny Monell (Mets) y Rey Navarro (Angelinos), y si debutan otros como Danny Ortiz (Pittsburgh), José De León (Dodgers) o T.J. Rivera (Mets).