Ver un juego de béisbol puede ser en ocasiones aburrido. Admítalo. Esperar por la conclusión de largas entradas puede a veces darle sueño hasta al más grande de los fanáticos de la pelota. Ahora bien. ¿Debería darle sueño a un empleado de un equipo operador de la pizarra de anotaciones de un equipo?

Pues eso fue lo que le sucedió anoche al mantenedor de la antigua pizarra del estadio Wrigley Field de Chicago. Según lo captaron las cámaras de la televisión, el hombre se fue “10-7” en la parte alta de la quinta entrada de lo que irónicamente era un gran juegazo entre los locales Cachorros y los Mets de Nueva York. En el momento los metropolitanos ganaban el partido por 1-0.

El gran problema que suponía su insoportable sueño es que la pizarra del Wrigley Field es totalmente manual. Las carreras, hits, errores y demás son colocadas manualmente y no electrónicamente.

No está claro cómo despertó el hombre. No se sabe aún si alguien lo llamó. Posiblemente despertó por el reclamo de los presentes en el “friendly confine” del estadio.

Lo bueno para él es que si despertó debió haberse gozado grandemente la manera que los Cachorros ganaron el partido al anotar dos carreras en la parte baja de la novena para dejar sobre el terreno a los Mets. De seguro la adrenalina debe haberlo dejado sin dormir por unas cuantas horas luego del partido.