San Diego. El final del camino y el objetivo deseado –el oro que se escapó en el 2013- se ve cada vez más cerca.

Un despiadado ataque de seis indiscutibles consecutivos en la parte baja de la primera entrada le dieron ventaja de 4-0 desde el inicio y confianza a los brazos de Puerto Rico para vencer 6-5 a Estados Unidos y asegurar su pasaje a las semifinales del Clásico Mundial de Béisbol por segunda edición consecutiva.

Con la victoria, Puerto Rico permaneció invicto en el Clásico con 5-0, tiene 2-0 en la segunda ronda, y se adueñó del primer lugar del Grupo F, ya que Estados Unidos y Dominicana tienen 1-1 y ambos se enfrentan mañana en la noche. Venezuela tiene 0-2

Puerto Rico tendrá en la tarde del sábado la oportunidad de finalizar con 3-0 al enfrentarse con la novena de Venezuela en un encuentro que comenzará a las 3:30 p.m. los suramericanos, lastimados por las lesiones, podrían no contar con el valioso Miguel Cabrera, quien se lastimó la espalda en el partido del jueves ante República Dominicana y se rumora que pudo haber abandonado el equipo debido a la lesión.

“Tratamos de mantener el juego que nos trajo hasta aquí, y fuimos agresivos en el plato y agresivos en las bases, y lo vimos en la misma primera entrada. Pero a la vez fuimos pacientes en ‘el home plate’ y estuvimos esperando los pitcheos”, comentó el dirigente de Puerto Rico, Edwin Rodríguez. “Y en las bases pusimos presión y eso fue la diferencia. En una roleta de rutina a tercera base Pagán le puso presión a Arenado y vino un error de dos carreras. Javier Báez robando bases y luego un doble robo. Ese juego le ha puesto presión a los equipos y hoy no fue la diferencia”.

El dirigente isleño indicó que luego de la victoria ante Estados Unidos, el plan será utilizar a Jorge López en el encuentro de esta tarde ante Venezuela y traer a José de León como su relevista.

Ante Estados Unidos “teníamos un plan con (Marcus) Stroman. Era hacerle que elevara la bola y podernos mantener en el medio del ‘field’. El falló muchas veces en el medio del plato y nosotros básicamente ejecutamos nuestro plan. Creo que eso fue sumamente importante porque en series cortas, cuando anotas temprano tienes una buena oportunidad de ganar, y esas cuatro en la primera nos pusieron en un nivel de confianza alto y salimos a jugar con más intensidad”, manifestó Carlos Beltrán.

Beltrán reconoció la importancia de la victoria y dio crédito a los días que pasó el equipo junto en Arizona, ya que dijo que esa experiencia les ayudó a enfocarse en crear unidad de equipo y de propósito.

“Esta victoria es grande no solamente para nosotros, sino para Puerto Rico, para nuestro país, para nuestra gente, que está disfrutando y sé que los estamos llenando de mucho orgullo y esperamos terminar esta misión”, dijo Beltrán. 

Por su parte, Carlos Correa dijo que avanzar a las semifinales “es algo realmente especial. Nada se compara con este momento: poder jugar por mi país, poder representar a Puerto Rico y llevarle alegría y felicidad a la gente en la Isla, que ahora mismo pasan por momentos difíciles”.

Seth Lugo lanzó 5.2 entradas y se acreditó la victoria. Este cedió cinco hits, incluyendo dos jonrones y tres carreras limpias.

Puerto Rico abrió el partido con hits consecutivos de Pagán, Francisco Lindor, Correa, Beltrán, Yadier Molina y Báez antes de que el lanzador de Estados Unidos, Stroman, pudiese registrar su primer out del partido con un elevado de sacrificio a Eddie Rosario, que remolcó la cuarta carrera.

Y Puerto Rico no miró hacia atrás.

Estados Unidos reaccionó en la alta de la segunda con doblete de Nolan Arenado y luego hit de Eric Hosmer que remolcó al antesalista para el 4-1. 

En la quinta Buster Posey pegó cuadrangular solitario y en la sexta Adam Jones lo imitó, dejando la pizarra 4-3.

Puerto Rico respondió con dos más en las piernas de Eddie Rosario y Ángel Pagán en un error de tiro a primera de Arenado y se despegó por 6-3.

Los estadounidenses no se rindieron y lograron marcarle dos a Edwin Díaz en la alta de la novena, cuando Díaz abrió dando base a Arenado y luego un hit a Eric Hosmer antes de ponchar a Buster Posey para el primer out.

Díaz tiró un ‘wild pitch’ que adelantó a los corredores a segunda y tercera antes de ponchar a Paul Goldschmidt para el segundo out, pero Brandon Crawford entonces le conectó un batazo contra la verja al naguabeño que acercó a los perdedores 6-5 en la pizarra, antes de finalizar con un ponchete a Josh Harrison, cerrando el encuentro y desencadenando la celebración.

El dirigente de Estados Unidos, el veterano Jim Leyland, dijo que realmente fue “un partido realmente bueno. Le dieron a Marcus (Stroman) unos cuantos turnos bien difíciles y realmente buenos en la primera entrada. Él hizo muy buenos lanzamientos. Y unos cantos de los batazos fueron duros y en otros ellos hicieron un tremendo trabajo de bateo, poniendo la pelota en juego, y las bolas picaron. Después de eso creo que Marcus enderezó y lanzó muy bien, al igual que el resto del ‘bullpen’”.

“Ellos están haciendo muchas cosas bien en este momento Son un equipo muy bueno. Juegan el juego de la manera correcta. Juegan una combinación de pelota grande y pelota pequeña, y hay que quitarse el sombrero ante ellos”, finalizó Leyland.

La escuadra boricua, que sigue invicta (5-0), regresa por segundo Clásico corrido al final four del campeonato, que este año se celebrará en la Ciudad de Los Ángeles, California.