Tras 108 años de maldiciones y supersticiones, los Cachorros de Chicago son campeones de la Serie Mundial.

Y Steve Bartman está contento por el logro, pero no aliviado.

El fanático acusado de extender la sequía del equipo de las Grandes Ligas por interferir en una jugada en la serie de campeonato de la Liga Nacional en el 2003, no tiene planes de realizar apariciones durante los festejos por el campeonato. 

"Solo estuvo deleitado porque los Cachorros ganaron, como todos los fanáticos de los Cachorros estuvieron", dijo Frank Murtha, abogado y representante de Bartman, a USA TODAY

"No tenemos planes de aparecer en la parada. De lo que hablamos Steve y yo fue que si los Cachorros ganaban, él no quería ser una distracción por los logros de los jugadores y la organización", agregó. 

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Bartman ha estado fuera del ojo público y no ha dado entrevistas desde el incidente ocurrido hace 14 años. Continúa trabajando y viviendo en el área de Chicago. 

Los Cachorros ganaron su primer título desde 1908 luego de vencer en siete partidos a los Indios de Cleveland.