El comediante californiano Will Ferrell invadió ayer cinco partidos de exhibición de los campos de entrenamiento de primavera de las Grandes Ligas en un intento por jugar todas las posiciones dentro del diamante entre diez equipos en un solo día.

La titánica encomienda del creador de personajes como el reportero ancla Ron Burgundy, el piloto de Nascar Ricky Bobby y el dueño y jugador de un equipo de la American Basketball Association, Jackie Moon, se hizo un tanto más fácil pues se trasladaría a cada uno de los cinco desafíos mediante helicóptero. Y claro está, Ferrell hizo de las suyas en cada uno de los partidos en los que participó.

La jornada para el veterano actor y ex miembro de Saturday Night Live (SNL) comenzó en el desafío entre los Atléticos de Oakland y los Marineros de Seattle. Ferrell comenzó el choque como el campo corto titular, pero una vez el lanzador Scott Kazmir retiró a los Marineros, Ferrell fue canjeado a Seattle por el ex lanzador de Grandes Ligas (y ex jugador de Oakland), el boricua Enrique “Kiko” Calero y una abastecimientos de refrescos por un año, en clara referencia a una movida realizada por el gerente general de los Atléticos Billy Beane. Precisamente, el propio Beane fue quien le informó a Ferrell del cambio.

Acto seguido, Ferrell ocupó la segunda base para los Marineros, y luego del tercer out, al comediante se le informó que fue cambiado a los Angelinos de Los Ángeles. Al llegar al parque rápidamente tomó el puesto de Mike Trout en el jardín central, donde fildeó un imparable del dominicano Wellington Castillo. De inmediato, Ferrell fue canjeado nuevamente, esta vez a los rivales de los Angelinos, los Cachorros de Chicago por una máquina de lavar ropa.

Durante su estadía con los Cachorros, la más prolongada de su gira, Ferrell comenzó como coach de tercera. Ferrell se ajustó a su nuevo rol rápidamente, pues le hizo la señal de correr hasta home al boricua Javier Báez pese a que fue sacado de out mediante un elevado. Además, utilizó jocosas pancartas con mensajes irreverentes como “cuidado de que no te estires un músculo” y “haz swing lo más fuerte posible”.

Luego pasó a cubrir la inicial en el cuadro de los Cachorros, pero tras el tercer out Chicago lo envió a los Diamondbacks de Arizona por un churro. Como su jardinero izquierdo, Ferrell permitió una anotación del jugador de cuadro puertorriqueño de los Rojos de Cincinnati, Irving Falú. Otros dos bateadores conectaron sencillos hacia Ferrell.

Y debido a tan pobre actuación, Ferrell fue cambiado a los Rojos, donde le tomaron una foto en el dugout junto con Irving Falú utilizando una enorme barba postiza. Ferrell también vería acción en el choque entre los Gigantes de San Francisco y los Medias Blancas de Boston, al igual que en desafío entre los Dodgers de Los Ángeles y los Padres de San Diego.

Ferrell organizó la gira como parte de un segmento de su página de Internet de comedia, Funny or Die, que saldrá al aire en un especial para la cadena de televisión por cable HBO. El actor espera recaudar $1 millón para costear becas universitarias para sobrevivientes de cáncer. Parte de la indumentaria y objetos que utilizó durante el día también serán vendidos en subasta.

Pero Ferrell también explicó que realizó la hazaña para conmemorar la gesta de hace 50 años atrás del pelotero cubano Dagoberto "Bert" Campaneris Blanco, quien el 8 de septiembre de 1965 se convirtió en el primer pelotero en las Grandes Ligas en jugar las nueve posiciones en un partido.