Isla Margarita, Venezuela. Descartados por muchos de los medios nacionales e internacionales que cubren el evento, los Indios de Mayagüez pusieron el viernes  uno de los signos de exclamación más fuertes de esta Serie del Caribe.

Los campeones de Puerto Rico se quedaron con el segundo boleto para el partido final del sábado  cuando,  en un duelo de lanzadores, eliminaron a los poderosos y locales Navegantes de Magallanes al derrotarlos con pizarra de 2-0 ante más de 15,000 fanáticos  en el estadio Nueva Esparta.

En la final,  Puerto Rico irá tras su primer cetro de la Serie del Caribe desde el 2000.  Los Indios enfrentarán a los campeones defensores, los Naranjeros de Hermosillo (México),   a las 8:30 de la noche, hora de Puerto Rico.  

México dejó fuera a los Tigres del Licey de República Dominicana en la primera semifinal del jueves.

Puerto Rico contó con una impresionante actuación del camuyano Giancarlo Alvarado, quien lanzó seis entradas completas en las que permitió solo dos hits, dos boletos y ponchó a dos.

Durante seis entradas, el derecho venezolano que abrió el partido, Daryl Thompson, fue un digno rival de Alvarado, enfrascándose en un estresante duelo de lanzadores que mantuvo ansiosos a los fanáticos de ambos equipos.

Steve Smith, en una brillante labor de relevo de dos entradas y un solo hit, se anotó la victoria, mientras que Tyler Herron lanzó la novena entrada para el salvamento.

La jugada decisiva vino en la parte alta de la octava entrada, con dos outs. Fue un batazo de Eddie Rosario por encima del alcance del campocorto, cuando había tres corredores en base, lo que  remolcó las dos vueltas  de la victoria. 

Rosario bateaba con Luis Montañez en tercera, Miguel Abreu en segunda y Ozzie Martínez en primera, tras embasarse este último por un error del campocorto Eduardo Escobar.