Estamos a ley de días para que Floyd Mayweather Jr. y Manny Pacquiao finalmente estén tan cerca que puedan sentir la respiración de cada cual. Parece que fue ayer cuando se anunció el encuentro que el mundo estaba pidiendo a gritos. 

Pacquiao ayer siguió al pie de la letra su rutina. Prefirió viajar hasta Las Vegas en una Lincoln Navigator en lugar de volar. El filipino encabezó una mega caravana desde Los Ángeles, California, acompañado por sus seguidores. Asimismo, optó por no seguir la tradición de participar de la entrada triunfal al MGM Grand. En su lugar, llegó directamente al Mandalay Bay, su hospedería preferida.

Mayweather, mientras tanto, también tiene sus tradiciones. Claro muy distintas. Aunque reside en Las Vegas y no tiene que conducir extensas millas, se toma el tiempo que entienda necesario para arribar al MGM Grand mientras los periodistas, rodeados por cientos de curiosos que se apoderan del vestíbulo, esperan pacientemente. Se espera que Mayweather llegue a las 6:00 p.m.

Desde ese momento, comienza oficialmente la cuenta regresiva para el tan esperando momento cuando se escuche la campana.

La conferencia de prensa está programada para el miércoles desde las 4:00 p.m. (hora de Puerto Rico). Se anticipa que solamente Pacquiao y Mayweather participarán de la misma. Al día siguiente, tienen en agenda unas entrevistas por satélite con medios nacionales e internacionales. Además, el resto de los participantes del cartel tendrá un encuentro con la prensa a partir de las 8:00 p.m.