El exenebeísta Delonte West es el más reciente caso de tantos que disfrutaron de éxito como atletas, pero que ahora están arruinados caminando por las calles y en necesidad de asistencia.

El portal de noticias de celebridades TMZ.com publicó recientemente unas fotos de West en mal estado, supuestamente descalzo, y merodeando las afueras de un negocio de comida rápida en Houston. Según TMZ, West fue identificado por un joven fanático de baloncesto, quien le preguntó si en realidad era el otrora seleccionado en la primera ronda del sorteo de novatos de la NBA en el 2004.

Varios deportistas puertorriqueños también han enfrentado situaciones similares. A continuación, le presentamos aquellos que fueron encontrados sin un techo que los proteja.

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Ricky Otero

El expelotero de Grandes Ligas estuvo viviendo en las calles de Cancún, México. El rotativo Récord reportó en el 2009 que el exjugador luchaba con las adicciones al alcohol y las drogas. En aquel momento, fue visto como indigente en el balneario ubicado en la costa del Caribe mexicano. Otero jugó tres campañas en las Mayores (1995-97) con los Mets de Nueva York y Filis de Filadelfia. Luego, entre 2000 y 2005, estuvo activo en la liga mexicana con los Langosteros de Cancún.

Wilfred Benítez

En septiembre de 1986, Benítez viajó a Argentina para enfrentar a Carlos María del Valle Herrera. El puertorriqueño perdió por nocaut técnico y, debido a que no tenía dinero para salir del país, quedó varado allí por más de un año.

No fue hasta que Leonardo González, entonces secretario del Departamento de Recreación y Deportes, recibió la encomienda de ir a Argentina para traerlo de regreso a Puerto Rico justo a tiempo para la Navidad de 1987.

A pesar de que Benítez amasó una fortuna durante su carrera en el boxeo rentado, perdió todo el dinero. Una vez se retiró, le asignaron dos asistencias gubernamentales que ascienden a $1,125 mensuales.

Wilfredo Rivera

El expúgil encontró fama cuando enfrentó figuras tales como Oscar de la Hoya y Pernell Whitaker, entre otros. Sin embargo, en el 2013 tocó fondo cuando perdió su empleo y una profunda crisis familiar lo dejó viviendo en un carro con sus pertenencias.

Rivera alegó que en un pleito legal con su exesposa le cedió “sin querer” unas propiedades, las cuales ella tiene alquiladas y recibe todo el dinero que generan las rentas. Además, según Rivera, le exigieron manutención por sus tres hijos de 14, 13 y 11 años que viven en Estados Unidos.

Alex Ramos

El excampeón mundial mediano, de padres puertorriqueños, cayó víctima del abuso de las drogas y el alcohol después de su retiro. Por ello, se encontró viviendo en las calles hasta que ingresó en un centro de rehabilitación.

Luego, fundó la Fundación para los Boxeadores Retirados, una organización sin fines de lucro en 1998. La misma  está localizada en Simi Valley, California. En el presente, Ramos sufre de demencia pugilística, una condición provocada por conmociones cerebrales, algo común en los boxeadores.