Los días de dar y recibir golpes quedaron en el espejo retrovisor de la vida del boricua Carlos “el Indio” Quintana.

Luego de ser vapuleado por cuatro asaltos por el cotizado prospecto Keith Thurman, el ex campeón mundial anunció su retiro definitivo de los cuadriláteros sin poder cumplir su deseo de una nueva pelea titular.

“No voy más. Lo había dicho antes de la pelea, que si perdía, me iba a retirar”, confesó Quintana a Primera Hora vía telefónica desde Atlanta, donde hacía escala antes de llegar a Puerto Rico procedente de Ontario, California.

“Era una pelea importante para mí. Si ganaba, iba a estar en posición de otra oportunidad titular, pero al perder, no estoy en disposición de empezar de nuevo desde cero”.

Según Quintana, su fornido rival le salió mucho más complicado de lo que pensaba, particularmente luego de recibir un sólido golpe al costado que lo llevó a la lona restando 27 segundos del primer asalto.

“Ese golpe al cuerpo fue crucial en el desenlace de la pelea. Nunca me había pegado tan duro al cuerpo. Me levanté a duras penas en el conteo de nueve. Se me fue la fuerza y la velocidad el resto de la pelea”, admitió Quintana.

“Pude aguantar casi tres asaltos más y sentía que se estaba cansando, que estaba respirando más fuerte. Pero mis esperanzas de usar la experiencia en los asaltos finales se desaparecieron en el cuarto asalto. Me descuidé, me lastimó, y ahí se acabó la pelea”.

Luego de visitar la lona por segunda vez y recibir una andanada de golpes de Thurman, el árbitro detuvo el combate cuando restaban 41 segundos del cuarto asalto.

La vida sigue

Ahora que ya no se pondrá los guantes otra vez, Quintana indicó estar tranquilo con su decisión y tiene planes en agenda.

“Ahora a trabajar en mi gimnasio en Moca y en cualquier cosa que aparezca. Yo trabajo en lo que sea”, dijo Quintana. “Pero, sobre todo, voy a dedicarle tiempo a mi familia. El boxeo me dio mucho y le estoy agradecido al deporte, al igual que a todos los fanáticos que me apoyaron en mi carrera”.

Quintana se retira con maca de 29-4 con 23 nocauts, incluyendo un campeonato mundial en las 147 libras cuando sorprendió a Paul Williams en el 2008.

Durante su carrera peleó contra casi todo lo mejor de las 147 y las 154 libras, siendo sus primeras tres derrotas ante púgiles elite, como el propio Williams (en revancha), su compatriota Miguel Cotto y Berto.