Hace poco menos de tres años,  Mónica Puig  y  Félix Verdejo compartieron durante una entrevista para un reportaje de promesas del deporte puertorriqueño.

También estuvieron   los peloteros Carlos Correa y José Berríos. 

Desde entonces, cada cual ha perseguido  sus respectivas ambiciones, pero Puig y Verdejo han mantenido una relación profesional al trabajar  en diversas campañas  publicitarias.

El pasado sábado, Puig dio un enorme salto en su carrera   cuando ganó  la medalla de oro del tenis femenino  durante los Juegos Olímpicos en Río de Janeiro. La gesta elevó la autoestima de un pueblo  abatido por una crisis económica y social.

Verdejo, mientras tanto, deberá esperar por su oportunidad. En lugar de sumergirse en la preparación para lo que se perfilaba era su primer combate por un cetro mundial, el púgil necesita tiempo para recuperarse  del accidente que sufrió mientras conducía una motora el pasado 7 de agosto.

Sin embargo, Verdejo es consciente de las expectativas que carga  sobre los hombros. 

“Félix reconoce que está en turno”, dijo Ricky Márquez, entrenador y manejador de Verdejo.  “Ahora está más comprometido que nunca con el País y su carrera”.

Verdejo, de hecho,  estuvo atento al partido de Puig contra la alemana Angelique Kerber y, al igual que millones de puertorriqueños, está  jubiloso por el resultado que paralizó al país.

“Félix se gozó el juego al igual que todo Puerto Rico”, relató Márquez.

Verdejo es considerado una de las principales promesas en el boxeo rentado. No obstante, las lesiones, combinado con otras incidencias, han dilatado su ascenso a cima  del deporte. 

“El accidente le sirvió para aprender una  lección. Sabe que debe tomar mejores decisiones. Es un muchacho joven y a veces se puede dejar llevar por otras personas, pero si algo positivo se le puede sacar es que fue una escuela para él (Verdejo). Al menos no fue una situación  grave y es cuestión de aprender y mejorar como persona”, reaccionó Márquez.  

‘No más’ en el 2016

Verdejo, por otro lado, aprovechará el resto del año para recuperarse de los lesiones que sufrió en distintas partes del cuerpo. 

Márquez reveló ayer que determinó  que el púgil de 23 años no subirá a un ring para un combate  hasta el 2017. 

“En el 2016, Félix no peleará más”, dijo Márquez a Primera Hora. “Nos concentraremos en su bienestar físico para asegurarnos que se recupere completamente de las laceraciones que tiene en el cuerpo”, agregó.

Verdejo tenía previsto retar a Terry Flanagan, actual campeón ligero de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), el próximo noviembre en Las Vegas, Nevada. 

Sin embargo, Márquez sostuvo que el plan quedó descartado para una futura ocasión.

El peleador, que regresó a su hogar el pasado viernes, volvió  ayer al  Centro Médico de Río Piedras para que los doctores le removieran los puntos de sutura en el rostro y la cabeza.

“Necesitará tiempo mientras sanan las llagas en los hombros y los brazos. Ahora nos concentraremos en cuidarlo bien para que se recupere lo antes posible”, concluyó.