El invicto boxeador puertorriqueño Félix Verdejo se convirtió este sábado en el Rey Mago de Las Gladiolas cuando llevó juguetes y un rato de diversión a los niños de esa comunidad capitalina.

Cuando niño, el llamado “Diamante” del boxeo boricua también recibió regalos en actividades similares que organizaban otros residentes de Las Gladiolas, donde vivió hasta los 16 años. 

Por eso, ahora que comienza a cosechar grandes triunfos como una importante promesa del boxeo internacional, quiso hacer por los más pequeños lo que un día hicieron por él. 

“Cuando niño, uno lo que espera es juguetes en las Navidades y eso me llenaba de felicidad”, recordó el atleta al ser entrevistado por este medio en ese vecindario, que espera hace años la construcción de un nuevo complejo residencial en el lugar donde una vez ubicaron las torres de Las Gladiolas.

“Qué bonito es ahora llevarle alegría a la gente que me vio crecer y se ha disfrutado conmigo los triunfos que he cobrado hasta ahora. Estoy bien contento de traerles lo que hacían conmigo”, expresó el joven púgil.

La actividad, realizada en el solar de la calle Quisqueya, en Hato Rey, donde ubicaron los cuatro edificios multipisos de Las Gladiolas, contó con el apoyo de Kids Drug Free, un programa de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) creado para prevenir y combatir el consumo de sustancias controladas. 

El programa está dirigido a niños y jóvenes con el fin de motivarlos a continuar en los estudios y destaca el deporte como herramienta para mantener una vida positiva, productiva, alejada de adicciones y delitos.

“Siempre llevamos las cosas buenas que podemos a la juventud de este país y sacarlos de los malos caminos, que se enfoquen en el área académica o en el deporte”, dijo Verdejo antes de rifar cinco bicicletas y repartir muñecas y carritos entre los pequeños. 

El evento, que reunió a una treintena de niños con sus familias, fue también un acto de solidaridad con los miembros de la comunidad que llevan años enfrascados en una lucha para que el gobierno reconstruya el residencial, tal y como se les prometió antes de que demolieran en 2011 las cuatro torres del complejo en el que llegaron a vivir unas 676 familias.

El presidente de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), Francisco “Paco” Valcárcel, dejó claro el apoyo de la entidad a los residentes de Las Gladiolas. “Esta es su comunidad y estamos aquí para defenderla. Cuentan con nosotros”, manifestó.

Por eso, la presidenta de la Asociación de Residentes de Las Gladiolas, Mirta Colón Pellecier, catalogó a Verdejo como “el Rey Mago que nos hace olvidar por un momento nuestra tristeza”.

Colón Pellicier consideró que “dentro de tantas tribulaciones, hemos tenido un rato de esparcimiento y alegría”. 

Otros boxeadores y excampeones acompañaron a Verdejo. En el grupo figuró Víctor “Luvi” Callejas, Samuel Serrano, Wilfredo Rivera, John Karl Sosa, Rey Ojeda y Víctor Bisbal.

El talento de Verdejo, sus orígenes humildes y su carisma han llevado a los expertos del boxeo a compararlo con el campeón mundial Félix “Tito” Trinidad. 

El año pasado, el atleta ganó sus siete encuentros, seis de ellos por nocaut. 

Su compañía promotora vislumbra llevarlo a un combate por un título mundial a finales de este año o principios de 2016. 

Sin embargo, fuera del cuadrilátero, el joven boxeador ha sido solidario con causas como la liberación del prisionero político puertorriqueño Oscar López Rivera, el apoyo a sobrevivientes de cáncer de seno y la colaboración con entidades que alimentan a personas sin hogar, lo que le ha ganado grandes simpatías más allá del mundo pugilístico.