El mexicano Giovani Segura lo volvió hacer en suelo boricua.

El ex campeón mundial demostró que no viene a Puerto Rico de paseo, y con buena  técnica y golpes certeros le dio una lección de boxeo al puertorriqueño Jonathan “Bomba” González a quien derrotó por nocaut a los 2:25 del cuarto asalto en la pelea estelar de la velada Noche de Campeones que se celebró en el International Ballroom de El San Juan Resort and Casino de Isla Verde, Carolina.

Con el triunfo, Segura (30-3-1, 26 KO) se agenció el título latino mosca (112 libras) de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) y le propinó a González (13-1, 11 KO) su primera derrota como profesional.

“Quiero dedicar esta pelea a mi fallecido manager. Agradezco al público (de Puerto Rico) que es muy humilde”, expresó Segura luego de la pelea, pautada a 10 asaltos.

Tal y como lo hizo contra el boricua Iván Calderón el 28 de agosto de 2010, Segura no se dejó intimidar por pelear en suelo puertorriqueño. Segura noqueó en ocho asaltos a Calderón en ese entonces y le volvió a vencer en una revancha el año siguiente.

“Lo felicito, es un gran campeón. Hablé mucho, pero de esto se trata, de vender peleas”, dijo por su parte González, quien aceptó que Segura “pega muy duro”.

Ahora la mirada de Segura se traslada a un posible combate contra su compatriota Juan Francisco Estrada, monarca mosca de la OMB.

El comienzo de la pelea fue bien parejo. El prospecto de 22 años no demostró temor al medirse al veterano mexicano. El boricua entraba sólido contra el mexicano, quien siempre iba al ataque.

Sin embargo, la cosa cambió en el segundo asalto cuando una sólida derecha de Segura mandó al suelo al boricua. González no fue el mismo, aunque dio muestras de que había cogido un segundo aire. Pero su esquina lucía muy preocupada.

En el tercer asalto, González siguió tirando, pero Segura respondía con buenos jabs que llegaban cómodos al rostro del boricua. La defensa de González fue muy pobre, y su esquina le gritaba y suplicaba que levantara las manos para evitar que Segura siguiera con su jab.

El público se metió de lleno en la pelea y comenzaron a gritar: “!Bomba, Bomba!”, en espera de una reacción del cagüeño.

No obstante, Segura sabía que estaba a punto de vencer a González, y así lo demostró en el cuarto asalto.

El puertorriqueño estuvo con su guardia baja lo que muy aprovechó muy bien Segura para conectarle otra sólida derecha que derrumbó por segunda ocasión en la noche a González.

El desenlace se aproximaba y Segura lo sabía, y con fuerte combinación de izquierda y derecha dejó en rodillas a  González. El árbitro Roberto Ramírez hijo comenzó con la cuenta, mientras la esquina del boricua le suplicaba que se levantara. Pero González reconoció que no podía más y con su cabeza, y con la mirada directa a su esquina, dijo “no más”, para así terminar la pelea. 

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