La ambición de Jason ‘Canito’ Sosa es ganar nuevamente un cinturón mundial. 

Primero, deberá vencer al cubano Yuriorkis Gamboa durante el pleito de mañana, sábado, que tendrá como escenario el Madison Square Garden de Nueva York.

“Quiero ser campeón otra vez en las 130 libras para luego subir a las 135 libras y ganar otro título mundial. He enfrentado a los mejores y quiero seguir haciendo lo mismo”, dijo Sosa el pasado miércoles después de la conferencia de prensa con los participantes de la función.

Originalmente, Sosa (20-2-4, 15 KO) había acordado enfrentar a Robinson Castellanos, quien se retiró del combate debido a una lesión. El cambio a Gamboa (27-2, 17 KO) no le causa preocupación, según dijo.

“El campamento se mantuvo igual después del cambio a Gamboa. No nos concentramos en nuestros oponentes, sino en lo que tenemos que arreglar ya que todavía sigo aprendiendo”, afirmó Sosa, de sangre puertorriqueña.

Para que Sosa sea relevante en la  división júnior ligera, necesita  regresar a la ruta ganadora. En su pasado compromiso en abril perdió el título de la AMB ante Vasyl Lomachenko, actualmente considerado uno de los mejores púgiles libra por libra del mundo. 

“Aprendí mucho de Lomachenko. Por ejemplo, todos mis golpes fueron agresivos y me agotaron. Lomachenko siempre estuvo activo, seguía tirando y tirando golpes. Nunca se detuvo y aprendí que debo hacer lo mismo”.

Después de la derrota, Sosa se estableció temporeramente en Puerto Rico para darle forma a un negocio en Isla Verde. 

“Necesitaba un descanso. Llevaba siete años concentrado en el boxeo siempre entrenando y peleando. Mi cuerpo necesitaba el reposo, pero estoy emocionado y listo para el sábado”, indicó.

“He probado lo que representa ser campeón mundial y una vez se llega a ese nivel hay que permanecer arriba enfrentado a los mejores”, concluyó.