Cuando McJoe Arroyo derrotó convincentemente al mexicano Hernán Márquez, el púgil puertorriqueño anticipó que su próximo combate sería por la corona de la Federación Internacional de Boxeo (FIB), versión de las 115 libras. Sin embargo, un acuerdo con el actual monarca Zolani Tete nunca se materializó y Arroyo tendrá que hacer una eliminatoria para acercarse un poco más a la deseaba oportunidad titular.

“Esperaba que después de esa pelea en México, la casa del contrincante, estaría peleando por el título. No se dio debido a que no se llegó a un acuerdo (con Tete) y la FIB ordenó otra eliminatoria para así determinar quién es el número uno”, explicó Arroyo después de completar un entrenamiento en ruta al evento del 20 de diciembre en El San Juan Resort and Casino.

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Esa noche, Arroyo medirá fuerzas con Mark Anthony Geraldo, un boxeador filipino que tiene récord de 31-4-3 con 14 nocauts. También estarán activos en la función el dos veces campeón mundial Román “Rocky” Martínez y José “Chelo” González, entre otros.

“Estoy claro que para esta etapa de mi carrera, la pelea sería por el título mundial. Acepté ir a México (el pasado junio) con el propósito de pelear por el título de salir airoso. Esta, se supone que hubiese sido la del título”, sostuvo Arroyo (15-0, 8 KO).

Sin embargo, el peleador de 28 años no está desanimado y toma en serio el duelo contra Geraldo.

“No he visto mucho de Geraldo, pero sé que todo filipino siempre viene listo para pelear. Siempre hay que estar a un 100 por ciento. Está número tres en la Organización Mundial de Boxeo y nueve en la FIB, así que está clasificado. No será una cáscara de coco”, destacó Arroyo.

Por otro lado, el peleador zurdo mantiene la esperanza de algún día encabezar una cartelera junto con su gemelo McWilliams Arroyo.

“Nuestra meta es convertirnos en campeones mundiales y, luego, defender o disputar títulos la misma noche. Está en nuestras mentes”, concluyó.