Floyd Mayweather ya puede decir que supera al legendario Rocky Marciano.

Y es que el ‘Money Man’ mejoró su récord a un emblemático 50-0 tras arruinar el debut del campeón ligero de UFC, Conor McGregor, al propinarle un nocaut técnico en el décimo asalto de su reyerta pugilística el sábado en la noche en el T-Mobile Arena de Las Vegas.

Con el triunfo, Mayweather Jr. supera la cifra de 49-0 de Marciano antes de colgar los guantes de forma definitiva en el pugilismo.

Sin embargo, la victoria vino un poco más complicada de los esperado para muchos pues McGregor logró establecer su jab por los primeros cuatro asaltos y hasta conectó zurdas cortas y algunos ‘uppers’ para llevarse claramente los tres episodios iniciales y, quizás, el cuarto en la evaluación de algunos.

Hasta conectó varios ‘hammer fists’ en la cabeza de Mayweather durante los agarres, algo común en las artes marciales mixtas.

Pero a partir del quinto, Mayweather presionó la pelea con mayor insistencia, su mano derecha comenzó a alcanzar el rostro del peleador de UFC.

De hecho, en el sexto epiosdio, Mayweather logró poner a McGregor en aprietos con sus combinaciones.

McGregor, no obstante, tuvo un segundo aire en el séptimo y entró con su zurda corta un par de veces. Pero nunca logró pegar su famoso recto de izquierda con la potencia que se le conoce. Nunca la tiró.

Así las cosas el séptimo episodio terminó bastante cerrado pero con Mayweather llevándose el asalto.

Sin embargo, ése sería el último asalto de lucidez para McGregor. El octavo fue de Mayweather y en el novena estuvo agarrándose cada vez que podía para sobrevivir.

El irlandés ya se veía sin gasolina en el tanque y Mayweather olía sangre, persiguiéndolo con su rectos de derecha. McGregor ya no los esquivaba con la misma astucia que en los primeros asaltos.

Tras apenas escapar del novena asalto, McGregor tiró lo que le quedaba en el décimo, pero Mayweather lo seguía conectando con frecuencia y tras acorralarlo con un par de combinaciones, el árbitro detuvo el combate con McGregor de pie.

“Creo que fue una detención prematura. Debieron dejarme continuar peleando. Déjenme caer al piso. Que el tipo me tumbe. Creo que fue una pelea cerrada”, indicó McGregor luego del combate, dándole crédito a Mayweather por su desempeño.

“Es un tipo de gran compostura. Ya no es tan rápido y no tan fuerte pero sí tiene gran compostura. Para esta pelea lo convertí en un mexicano porque peleó como un mexicano (caminando hacia al frente)”.

Mayweather, por su parte, cumplió con su vaticinio de que el combate no llegaría a los 12 asaltos.

“Si no me equivoco, yo predije que esta pelea no llegaría a la distancia. Mi plan fue cansar a McGregor y entonces comenzar a atacar”, dijo Mayweather.