Para el cuarto encuentro contra Juan Manuel Márquez, el filipino Manny Pacquiao no está dispuesto a dejar el resultado en manos de los jueces.

El dúo se enfrentará por cuarta ocasión para determinar un claro ganador de una vez y por todas.

Pacquiao ya ha estado visitando con frecuencia el WildCard Gym en Los Ángeles, California, en preparación para el combate que está pautado para el 8 de diciembre en el MGM Grand de Las Vegas, Nevada.

El filipino viene de una decepcionante derrota ante Tim Bradley el pasado junio y está convencido de que la única manera de borrar las dudas que pesan sobre él es derrotando a Márquez por nocaut.

“Ante Márquez saldré a pelear con la misma ambición y el mismo deseo de gloria que cuando empecé en el mundo del boxeo”, dijo Pacquiao al diario mexicano Esto.

Ojo en Mayweather Jr.

Pacquiao vislumbra que, de ganar el cuarto pleito, lo llevaría a finalmente enfrentar a Floyd Mayweather Jr en algún momento durante el 2013.

“Será en 2013 o nunca”, advirtió Pacquiao. “¿Acaso no puedo tener la sensación de que me está evitando Mayweather?”, cuestionó.

El propio Pacquiao ha dicho públicamente que está dispuesto a aceptar el 45 por ciento de las ganancias generadas, mientras que Mayweather Jr. recibiría el restante 55 por ciento. Además, el filipino se haría las pruebas de dopaje que ha exigido Mayweather.

No obstante, el llamado Pretty Boy le ha restado importancia a los comentarios de Pacquiao.

“Ahora dice todo esto porque está devaluado. Las condiciones no son las mismas, más ahora que viene de perder con Bradley”, sostuvo Mayweather Jr.

“Me da igual lo que diga la gente de si mereció ganar esa noche o no, nadie le quita la derrota y puede que siga devaluándose”, concluyó.

Sin embargo, sin dudas, Mayweather estará muy atento a lo que ocurra el 8 de diciembre entre Pacquiao y Márquez antes de decidir su próximo paso.

Mientras tanto, continúa la espera para quienes deseen ver a los dos mejores boxeadores dentro de un mismo ring.