Macao.- Manny Pacquiao se está preparando para visitar en los próximos días la ciudad de Tacloban, que fue devastada por un tifón, al regresar a Filipinas con su carrera pugilística nuevamente al alza después de una impresionante victoria sobre el estadounidense Brandon Ríos.

Pacquiao dijo después de su victoria del domingo en el casino The Venetian en Macao que planeaba viajar al epicentro del paso del tifón Haiyan, el cual mató este mes a más de 5,000 personas y forzó el desplazamiento de aproximadamente tres millones de residentes.

"Les prometí que después del combate iría a Tacloban para visitarlos", dijo Pacquiao. "Tan pronto como sea posible precisaremos la fecha, el día".

A pesar de la devastación, se colocaron pantallas gigantes en la plaza de la ciudad para permitir que los aficionados miraran la pelea realizada el domingo, y sus espíritus recibieron un muy necesario aliento con la victoria del astro filipino.

Cuando azotó la tormenta, Pacquiao ya se encontraba en un campo de entrenamiento en la ciudad sureña de General Santos, y aunque el primer impulso del boxeador y legislador fue ir a las áreas afectadas a ayudar, fue disuadido de ello por su entrenador Freddie Roach y otros que le aconsejaron que lo mejor que podía hacer era dar impulso al ánimo de la nación ganando la pelea.

"Fue muy difícil para mí, me sentí muy mal por lo que ocurrió", dijo Pacquiao después del combate. "Yo quería visitar el lugar, pero debido a mi entrenamiento no pude, así que sólo estuve rezando por ellos y envié a mi personal para llevarles ayuda".

"Este combate es por las familias y la gente afectada por el tifón; sencillamente estoy feliz de que Dios respondió a mi plegaria", agregó.

Aunque Pacquiao dedicó su victoria a su país, el triunfo tuvo también una importancia vital por razones personales, restaurando una carrera que parecía decaer después de derrotas consecutivas y casi un año fuera del ring.