LAS VEGAS.— Los reguladores del boxeo en Nevada presentaron una querella formal contra Saúl “Canelo” Álvarez por dopaje, lo que pone en riesgo su pelea del 5 de mayo ante Gennady Golovkin por el título de los medianos.

Álvarez podría ser suspendido un año tras dar dos veces positivo de clembuterol en análisis de orina que se le tomaron de forma aleatoria durante febrero en la ciudad mexicana de Guadalajara, donde nació.

La Comisión Atlética del Estado de Nevada ha fijado una audiencia para el 18 de abril, a fin de analizar la querella. Esa sesión reemplaza una que se había programado para el 10 de ese mes.

Así, la audiencia se llevaría a cabo apenas dos semanas antes del pleito, lo que pone en duda la viabilidad de la función.

La regulación del boxeo en Nevada contempla una suspensión de un año para púgiles que den positivo de dopaje por primera vez. Sin embargo, la propia Comisión tiene la facultad discrecional de reducir a la mitad el castigo.

Incluso si el “Canelo” recibe una suspensión de seis meses, sería imposible realizar el combate sino hasta agosto, cuando muy pronto.