Durante su reciente visita a Puerto Rico, Danny García aprovechó el tiempo al máximo.

Desde apreciar las murallas del Morro en el Viejo San Juan hasta disfrutarse un pincho de pollo en Piñones, el púgil de padres puertorriqueños hizo de todo un poco. Incluso, fue invitado para acudir al gimnasio Félix Pagán Pintor localizado en el barrio Amelia en Guaynabo, donde fue recibido por el ex campeón mundial Iván Calderón y un nutrido grupo de jovencitos que todas las tardes dicen presente para practicar el boxeo.

Tan pronto arribó, García quedó impresionado con las pinturas de Wilfredo Gómez que adornan la fachada principal del recinto deportivo.

Enseguida, Calderón paseó a García por el gimnasio donde fue recibido para el deleite de los asistentes.

“De la manera como me han recibido me hace sentir más orgulloso todavía de ser puertorriqueño”, sostuvo García. “Calderón es un gran campeón y es una motivación para trabajar con más ímpetu todavía. Le di las gracias por dejarme usar el gimnasio y ser parte de la familia”.

Luego de tomarse fotos, García subió al ring para hacer sombra y, además, compartir con conocimientos con los jovencitos que se inician en el deporte.

“Me motiva ver a estos niños que me ven como una figura, me llena de orgullo para seguir”, indicó.

García no descartó la posibilidad de utilizar el lugar para entrenar en el futuro.

“Uno nunca sabe, quizás”, dijo García, quien solamente hizo ejercicios de sombra y castigó la pera fija como parte de la corta sesión.